Tiempo de curiosidades

Dice Jesús Maraña en Infolibre, que “Cuando el buen periodismo entra por la puerta, la mala política sale por la ventana.”

Y lleva razón porque los ciudadanos tenemos derecho a ser informados y a que no se nos engañe. Cuando un periodista permite mentir a su entrevistado, callando a sabiendas de que miente, se convierte en cómplice de sus mentiras. Valles y Pastor lo saben y por eso ambos han salido a intentar justificar su silencio en el cara a cara de Sanchez y Feijoo.

Los ciudadanos tenemos derecho a la información, porque la información es un elemento fundamental de la democracia. No es por comparar, pero Silvia Intxaurrondo si ha cumplido su compromiso de servicio público al decir los datos reales a quien pretendía colarnos su estrategia de todo va mal. Feijoo al mentir, ofende no sólo a los diez millones de pensionistas sino a todos los demócratas.

Cuando uno miente y lo pillan, lo asume y corrige la falsedad. Las mentiras no se arreglan con aclaraciones sino rectificando y reconociendo que no se ha actuado bien y pidiendo disculpas. Feijoo no lo hará.

La época electoral debería denominarse “Tiempo de curiosidades”.

Porque curioso es que a una mentira se le llame inexactitud.

Curioso que mentir ni siquiera sea un error.

Curioso que nos llame la atención que una periodista actúe como periodista.

Curioso es que hace dos días, subir las pensiones con arreglo al IPC era insostenible, y ahora, quien lo afirmaba, aproveche la polémica creada, para garantizar que si gobierna mantendrá la subida de las pensiones según el encarecimiento de la vida, y lo vea sostenible, al menos en el corto plazo.

Curioso que la Asociación de la Prensa de Madrid haga un comunicado condenando los ataques a RTVE por parte de González Pons, que la ve como un "partido político" porque la entrevistadora no se tragase las trolas de su jefe.

Curiosidad es que un candidato a presidente de un estado democrático se demuestre como un manipulador nato.

Curioso que nos sorprenda la integridad profesional de una periodística.

Curioso que un o una periodista no se arrugue ante un mentiroso.

Curioso que en lugar de copiar la estrategia del superior (Feijoo) sea el superior el que copie la estrategia de la subordinada (Ayuso).

Curioso que nadie se inmute cuando un candidato dice disparates, bulos, medias verdades o patrañas, y sus votantes no se lo cuestionen.

Curioso que nadie admita que su candidato ha quedado en evidencia.

Curioso que solo en España haya un partido en la izquierda que cuando su electorado se cabrea, en lugar de abstenerse vota al partido rival que está en la derecha, lo que no sucede a la inversa.

Curioso que quienes dicen amar España, no vean un dislate que, a un candidato hipócrita, mentiroso y faltón, se considere apto para presidir un país.

Curioso que hayan conseguido convertir en deporte nacional la caza al hombre, intentando destruir y deshumanizar a Sánchez.

Curioso que las mentiras no transformen a un personaje moderado en deslegitimado.

Por lo demás, para el líder gallego, mentir es un día más en la oficina. Sus mentiras son menudencias. Pero no da miedo el candidato, sino quienes le han puesto ahí. Y como su antecesor seguirá mintiendo y le votarán, aun sabiendo que miente.

Hemos evolucionado, porque cuando Rajoy mentía le aparecía un tic, ahora tenemos a Feijoo que miente y ni parpadea.