El domingo sin consulta permite leer. Aunque contemplo que son pocos los medios que hoy se hacen eco de una documentación: las actas de las reuniones del gobierno de Aznar con ETA. Pero están ahí, y por mucho que quiera Feijoo mentir al respecto, son la muestra de una verdad irrefutable: que todos nuestros gobernantes negociaron para acabar con el terrorismo. Solo cumplen con su obligación.
Por eso me resulta tan paradójico, que doce años después, alguien pretenda negar la mayor, buscando disfrazar como si de un dechado de virtudes se tratase, el logo de un partido, que además de corrupto, se afana en reprochar a los demás lo que el ha hecho muchas veces. Si a eso le sumamos la versión que dieron de los atentados del 11 M, pocos deberían dudar que son el partido de la mentira, para el que todo vale con fines electoralistas.
Vivimos la evidencia de que PP y Vox necesitan a ETA en elecciones, para así no tener que hablar de sus planes con los servicios públicos y nuestros derechos. El acta publicada hoy, demuestra cómo los representantes de Aznar negociaron acercar los presos de ETA al país vasco, y otros asuntos, estando aun caliente el cuerpo de Miguel Ángel Blanco, de cuyo asesinato no había transcurrido ni un año. De esas negociaciones, incluso presumieron públicamente de la excarcelación de etarras, e incluso en ellas estuvo sobre la mesa el estatuto de Navarra. Era el entonces PP de la generosidad y el perdón, todo ternura y responsabilidad para alcanzar el fin de la violencia. Los mismos que negociaban entonces, son los que hoy llaman filoetarra a un gobierno legítimo. Para muchos medios, el gobierno entonces demostraba su valentía, pero hoy, esos mismos medios y por boca de los mismos periodistas, se flagelan, no por un pacto inexistente, sino solo porque coincida el sentido del voto de Bildu con las propuestas del gobierno.
Los representantes de Aznar se comprometieron con Otegi y HB a abordar la situación política como paso previo a una “negociación política”, y para ello Aznar cumplió las dos peticiones de HB: medidas penitenciarias y asumir a HB como interlocutor. Siete días después de esa reunión, el propio Aznar dijo literalmente en una comparecencia: “El cese definitivo de la violencia no es un objetivo partidista, ni un dictado humillante, ni la contrapartida de un precio político. Es la piedra angular sobre la que asentar el proceso de normalización, que corresponde a las instituciones y a todas las fuerzas políticas vascas, sin excepción”. Era el mismo Aznar que hoy se nos muestra desmemoriado, el mismo que el 12 de enero de 1999, en una rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa nos informó a bombo y platillo: “Ya no hay ni un solo preso de ETA fuera de la península. Todos han sido trasladados, todos”.
La hemeroteca está ahí, y es cruel con el PP. Veamos un repaso: 13 de julio de 1997, pocos días después del asesinato de Miguel Ángel Blanco, publican que ETA podría declarar una tregua; 28 de noviembre de 1997, M A Rodríguez, hoy asesor de Ayuso y entonces portavoz de Aznar decía que “no debe haber ni vencedores ni vencidos”; la declaración de una tregua en septiembre de 1998, y desde ese día hasta noviembre de 1999, el gobierno del PP excarcela a decenas de terroristas, les acerca a 1200 presos, y permite que regresen 300 etarras desde el extranjero; por desgracia para todos los españoles, se rompe la tregua, pero el gobierno del PP siguió hablando de negociar. Entonces era por sensatez.
En todo ese tiempo, los que hoy llaman “negociador con terroristas” al gobierno, ya estaban en política. Feijóo ocupaba un cargo en el gobierno de Aznar y Abascal en 1999 ya iba en las listas de un PP ex carcelador, algo que hoy ha olvidado. Toda negociación era normal, hasta que perdieron las elecciones y llegó Zapatero al gobierno y sin pensarlo volvieron al mismo discurso que utilizan hoy contra Sánchez. PP y Vox siempre han estado necesitados de resucitar a la banda terrorista.
¿No debería ser portada de todos los medios de comunicación esta acta como lo fueron las negociaciones de Aznar, o lo son las acusaciones al actuar gobierno de pactar con Bildu? No lo harán. Está claro que el PP utiliza de nuevo a ETA, como ya lo hizo en las últimas municipales, y con ello se ahorra explicar sus planes si gobierno, rellenos de un fascismo capitalista similar al de la Italia de hoy, pero que necesita ocultar hasta después el domingo. No nos lo explicaran ni Carlos Herrera, ni AR, ni S Griso, ni ABC, es lo esperable, porque no pueden morder la mano que les da de comer. Pero tampoco se entiende que habiendo muchos buenos y decentes periodistas en nuestro país, también hoy callen. ¿Dónde está la dignidad ligada a la verdad pura y dura?
Feijoo y sus corifeos, aunque así lo verbalicen, no buscan justicia para las víctimas, sino liberar su dosis de odio. Son los que acusan a este gobierno de ser más duro con las víctimas que con sus verdugos, porque no solo demuestran su melancolía del franquismo, sino lo que es mucho más vomitivo, su melancolía de ETA. Esto se llama juego sucio, no solo es cinismo o hipocresía. Es como estar viendo un programa de la 2 en el que los buitres se alimentan de carroña.
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