Ayer fue BILDU y hoy le ha tocado a Correos. Volvemos a la táctica de las municipales. Vuelven a desenterrar a ETA y el fraude electoral. Siempre piensa el ladrón que todos son de su condición y quien está acostumbrado a hacer trampas, piensa que todo el mundo las hace. Lo malo no es el tramposo, sino quien corea sus trampas. Es el libro de estilo de los Trump y Bolsonaro. No le importa utilizar mentiras fácilmente demostrables como en el debate. Nada le frena al falso moderado. No importan las instituciones ni sus trabajadores, solo alcanzar el poder.
¿Qué insinúa Feijoo sobre Correos? ¿qué cuándo él era el director general de Correos veía posible manipular las elecciones? ¿qué las manipulaba? Todo este asunto es de vergüenza, pero lo es más aún la respuesta de correos de "apartarse de debates" en vez de condenar el bulo.
En una democracia se pueden perder unas elecciones, el problema es cuando en unas elecciones se puede perder la democracia.
Buenas noches
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