Congreso del PSOE este fin de semana. Ni ha ido tan bien como hace nada en Ferraz esperaban, ni tan mal como en Génova 13 deseaban.
Como dato importante se ha anunciado que el Gobierno creará una empresa pública de vivienda encargada de construir y gestionar viviendas desde la Administración General del Estado. No parece que la construcción sea una solución acorto plazo y el problema es hoy y no mañana. Ojalá se refieran a vivienda para el alquiler, que tenga prohibida su venta, y eso no impida aplicar otras medidas necesarias, como fijar precios máximos para alquileres privados. Si el tema de la vivienda no se pone en marcha ya, esto acabará por explotar en las manos del PSOE y no por las denuncias de Manos Sucias. En cualquier caso, los medios de derechas lo consideran una burla, y los de izquierda dejan entrever que aunque con decisiones importantes, también ha sido una oportunidad perdida para dar un giro a la izquierda más evidente.
Toda organización corre el riesgo de ser parasitada. Los errores no son patrimonio exclusivo de la derecha, y al PSOE le es aplicable por la derecha y por la izquierda. Tras este congreso Pedro Sánchez continúa en el poder, y en la derecha culpan a los medios progresistas de su supervivencia. Para el PP debería haber muerto siete u ocho veces en el último año, Cada vez que le fabrican un problema lo entierran, pero debe tener genes de gato y superarlos en número de vidas. Para Feijoo todos los medios deberían lanzarse contra Sánchez y forzar su dimisión. Para ensanchar su espacio, el de la socialdemocracia, toda la izquierda, y el PSOE con ella, necesita no sólo creer que se puede sino combinar eso con autocrítica constante y asumir que toca andar por un territorio social y electoralmente desconocido.
Los medios de derecha, al contrario, todo les parece motivo de dimisión sin poner en duda que muchas cosas no son como ellos quieren. Por ejemplo, lo que dice el tal Aldama, claro que debe ser tenido en cuenta, pero de ahí a no querer ver que alguien en la cárcel es capaz de acusarse de matar a Viriato para salir libre, pero los medios de la derecha no deberían callarse que como imputado y no como testigo, no tiene la obligación legal de decir la verdad declaran. De ahí a dar todo lo que cuente por bueno, hay un paso y grande. Muchos medios han informado como si lo que dijo Aldama fuera un hecho confirmado y convierten en sentencia irrecurrible lo que apenas son indicios o declaraciones inconsistentes.
Parece que ya no se acuerdan de cuando Federico y Pedro Jota se inventaron que el 11M fue ETA y el PP aplaudía a rabiar. Debe ser que como esas mentiras no quitaron a ambos de la primera línea de la información, sino que hoy siguen permitiéndose dar lecciones de periodismo. Quizá por eso hoy con sus titulares, ABC, El Mundo, OK Diario, Voz Populi, The Objetive, El Debate y demás fanes periodísticos de Feijoo, hacen lo mismo: mentir. Eso sin hablar de periodistas concretos que más parecen sicarios a sueldo que periodistas de verdad. ¿De verdad se atreven a afirmar que en España hay censura? Pero claro, es la prensa de izquierdas la partidista y la que miente sobre la realidad política.
Y en el trasfondo Madrid, donde lo que pasa con sus ciudadanos, y en el interior de los dos grandes partidos, parece no tener nombre ni apellidos, es incalificable.
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