El PP continúa con su estrategia de ganar tiempo. Cualquier pregunta que le hacen sobre su gestión de la DANA, tiene como respuesta que solo responderán tras la comparecencia de Mazón el jueves. Da igual sobre que les pregunten ¿qué hora es? responden, el jueves. Pero mientras nos dicen "no vamos a embarrar la política", si cargan con toda su artillería contra Teresa Ribera en Bruselas. La intervención ayer en el euro parlamento de la ilustrísima Sra. Monserrat (esa honorable portavoz del PP que disolvió su empresa familiar en 2017 para no pagar a Hacienda los más de cuatro millones que debían) señalando a Ribera como única culpable de la tragedia en Valencia nos da idea de cómo son capaces de manipular la realidad, lanzando una cortina de humo, que además de manchar la imagen de la futura vicepresidenta, pretende desviar el foco de atención del presidente valenciano. Muy curioso que en Andalucía las alertas de la AEMET sean magnificas y sirvan para prevenir desgracias personales y en Valencia eran difíciles de creer según Feijoo, siendo las mismas.
El PP nunca ha tenido escrúpulos, y Mazón es un digno representante del acostumbrado comportamiento ignominioso de su partido. Ya escupieron a las víctimas del 11M, a los militares del Yak 42, a las víctimas del metro de Valencia, a los vecinos de San Fernando y a los 7291 mayores a los que negaron la asistencia. Ahora lo están haciendo a las víctimas de la inundación, porque pese a ser responsables máximos de la mayor tragedia de la historia de Valencia, saben que mientras tengan a los medios de comunicación agarrados por sus ayudas directas y por la publicidad institucional y se mantenga la manifiesta derechización de las togas, la única justicia que podrían obtener esas víctimas sería en las urnas, y con ambos instrumentos a su servicio no les será difícil impedirlo. Nada nuevo bajo el sol.
Los informadores a sueldo de Génova 13 siguen insistiendo en sus medios y en las tertulias televisivas donde participan hoy y mañana también, en un asunto: el gobierno central debería haber intervenido y quitar el mando de las operaciones a la Generalitat. Hasta ilustrísimos moderadores de debates electorales, feroces defensores de la inmaculada Constitución, guía insigne de la maravillosa transición a la democracia hispana, se permiten decir públicamente que "hay que saltarse los protocolos", o lo que es lo mismo, que el gobierno debería haberse saltado la Constitución.
Digan lo que digan, no es fácil entender, que el miércoles sea el PP de Feijoo el que pida que quiten las competencias a su presidente autonómico (salvo que ellos mismos le consideren un inútil, que lo es) pero que, si así lo consideran, entonces resulta aún más incomprensible, que a las 24 horas de haberlo pedido, salgan defendiendo la buena gestión de Mazón (el señor de las largas sobremesas que, entre otras grandes medidas, al llegar al gobierno sustituyo bomberos por toreros). Lo uno y lo contrario, es propio de los moradores del frenopático, (manicomio en lenguaje de la calle).
Tampoco es fácil de entender, que desde la izquierda del gobierno central se insista también en que, ante la inutilidad del gobierno de la Generalitat debería haberse retirado el mando de la gestión (yo lo he pedido en este mismo muro), sin valorar el retraso operativo que ese cambio de responsables hubiera provocado en el abordaje de los trabajos de limpieza y restauración de infraestructuras. No estaría mal que si lo piden, puntualizasen en qué momento de los acontecimientos debió el gobierno central asumir esa gestión ¿Tras el aviso de la AEMET o la Confederación? ¿o incluso antes del aviso? o ¿Cuándo no encontraban a Mazón? o ¿Después de la alerta a las 20, 11 horas? o ¿Al día siguiente? En cualquiera de esos supuestos, ya se habían producido los fallecimientos. En cualquiera de esos momentos, los fallecidos ya lo serían, por lo que solo pueden ser imputables a la Generalitat por no emitir la alerta que le enviaron AEMET y ante avisos de la Confederación Hidrográfica, en tiempo y forma. Al gobierno central solo se le puede responsabilizar del tiempo que tardó en intervenir con todos los medios, a partir del momento que la Generalitat se los solicitó, si es que existe un retraso no justificado.
Pero hay otro aspecto del que se habla poco. De como algunos han convertido la zona cero de la catástrofe en un parque temático donde, en lugar de ayudar a los vecinos como hacen los voluntarios, nos encontramos a un montón de influercers, de famosos y famosillos, que no saben lo que es una escoba, haciendo videos y fotos para colgarlos en sus perfiles y muros. Debería caérseles la cara de vergüenza por utilizar imágenes de barrios destrozados, el dolor de las familias afectadas y el cansancio de las personas que han ido a ayudar, para sus fines comerciales. Los solidarios no necesitan fotos, los intrusos sí.
Lo decía Maruja Torres, algo estamos haciendo mal cuando los niños ya no quieran ser bomberos o policías, sino influencers. Una pena.
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