Esta mañana ha comparecido Lobato. Sin preguntas que es lo que se lleva ahora como el tractor amarillo. De verdad que cuesta mucho entender todo lo que rodea el asunto de fraude fiscal del novio de Ayuso.
Ya lo decía Ignacio Escolar hace una semana, que cada vez que el PP mete la mano, primero cae un socialista, y aquí parece que también se va a confirmar esa máxima. El fraude a Hacienda del novio lo han vuelto contra el gobierno, PSOE y la Fiscalía. Todo se ha vuelto tanto contra el fiscal general del Estado (investigado por el T Supremo), como contra el propio PSOE al citar a Lobato a declarar, como testigo, el viernes. Debe ser la citación de una testigo más rápida conocida en una causa judicial en los últimos siglos.
Raro, raro, raro, que Lobato acudiera a una notaría sin avisar a nadie y para registrar mensajes intercambiados con una compañera de partido, lo que el lunes el propio Lobato confirmó en rueda de prensa. Lo hacía para cubrirse las espaldas de que a el no le había filtrado nada la fiscalía general del Estado. Pero hoy en su rueda de prensa Lobato no está acreditando el origen lícito de la filtración y lo sabe. Lo que no se entiende es cómo ha llegado a la prensa su visita a una notaría. Pero no entiendo tampoco porque no publica el nombre de esa notaría, con dirección incluida, ni como no la denuncia por revelación de secretos. Ya veremos en que acaba todo este pifóstio, pero o el PSOE sale a la carga y vuelve a poner el foco en Alberto González Amador y su pareja, o la factura que va a pagar ese partido ante la opinión pública será de las que hacen época.
Parecen haber olvidado en Ferraz, que IDA vive en el piso de lujo pagado con lo defraudado. No repiten que ella se pasea en el coche pagado con lo defraudado, porque es el novio quien ha confesado que ha defraudado. Parece que el origen de ese dinero ya no importa, ni que se diese un pelotazo de mascarillas en pandemia, parece que solo son importantes las mascarillas del caso Koldo. Resulta que IDA no debe tener nada que ver con eso, aunque sea la presidenta de la Comunidad, y también debe ser imposible que ella supiese nada de estos asuntos particulares de su novio que seguramente consiguió el contrato de la Comunidad por arte de magia. Tampoco debe ser indicativo de nada, que todo el PP se haya reunido con el novio para preparar la defensa, ni que la relación de la Comunidad de Madrid con Quirón, pudiera haber facilitado el pelotazo del novio de la presidenta de la Comunidad. Igual le sucede como a Mazón que eso de presidir algo no es un tema de los presidentes de las CCAA.
Está claro que no. Ellos son gente seria y responsable. Que solo se reúnen y almuerzan para levantar la economía de sus respectivas comunidades, y que si el responsable político de la muerte de más de 200 personas en Valencia es protegido con el silencio de sus compañeros, eso es por responsabilidad y por cohesión interna de su partido. Ya sabemos que lo que debe importarnos realmente a los españoles es que a la mujer del presidente le gusta mucho figurar, y si no encuentran pruebas de que haya delinquido, deben condenarla por vanidosa.
Desviada la atención del foco de la investigación al novio, es la demostración de como en el PP son especialistas en el manejo de la justicia y sus tiempos. Y por último, que sea precisamente el ABC, afín al PP, quien haya tenido la exclusiva de que llevó a la notaría la conversación de WhatsApp, no deja de ser llamativo. Esperemos que el chivatazo de que acudió a la notaría no proceda del propio Lobato, que cosas más extrañas se han visto, y las que nos deben quedar por ver.
El día es aún largo, y hasta el viernes que es el Congreso del PSOE aún queda tiempo para más episodios de este novelón.