POR NO CALLAR

La Ley Mordaza se aprobó para impedir la protesta ciudadana. Muchos de sus artículos son de tipo autoritario y establecen principios de dudoso carácter democrático.

No se puede plantear una reforma medio pensionista en una democracia moderna sino su derogación completa, para que se garantice el ejercicio de nuestros derechos y libertades. Negar el derecho a la protesta, nos deslegitima como estado de derecho y nos convierte en lo que ya somos, un estado de desecho donde el poder judicial y algunos miembros de las fuerzas de orden público se creen con absoluto derecho a actuar sin ningún límite.

El líder del PP reproduce en el Congreso los argumentos de la extrema derecha europea para impedir la transparencia en la propiedad de medios y en la publicidad institucional. La derecha considera una amenaza que el dinero que da a los medios salga a la luz pública y no pueda entregarse a quienes han sido condenados por incumplir la ley o por mala praxis.

Algo tendrá que ocultar cuando no quiere que se sepa, que diría el moderado Borja Semper.

Merece un comentario la reacción a la propuesta de Medidas del plan de regeneración democrática. Rápidamente ha aparecido la demagogia de la derecha, afirmando que es un ataque a la libertad de prensa y de información. Son las mismas medidas que el PP aprobó en Europa y que entrarán en vigor a mediados de 2025, pero allí eran para mejorar la democracia y aquí son solo de la dictadura sanchista. ¿Habéis oído alguna propuesta del PP al respecto?

Personalmente creo que, al contrario de lo que en los medios se lee, se queda muy corto para lo que este país necesita. No tiene explicación que muchos medios de comunicación pierdan dinero cada año y sigan abiertos.

Bueno, si la tiene, porque su verdadero negocio no es la información, al menos no lo es el de sus dueños que están actuando en otros sectores distintos al de la comunicación pero que encuentran aquí la influencia política que esos medios les proporcionan para sus negocios. Ahí es donde están sus ganancias. La prensa es algo de mucho valor para influir política y económicamente.

Son los propietarios los que fijan la línea de sus editoriales, los periodistas no suelen ser los dueños, sino asalariados en una redacción. Por eso es muy importante conocer quiénes están detrás de cada medio. Detrás de su verdad siempre hay un conflicto de intereses. Así que cuanto más trasparente sea esa propiedad mucho mejor para conocer si lo que nos cuentan es la verdad real o su verdad interesada.