MURIÓ EL PERIODISMO

Entre el 8M y el 11M. Defendamos las políticas que mejoran la vida de la gente como hicimos ayer. Olvidemos la absurda idea de pensar que la política se hace a base de eslogan o de tuit. Porque si no, nos la harán otros con mentiras, como lo intentaron hace 20 años.

Si cada día no nos levantamos intentando consolidar derechos y pelear por otros nuevos, no habrá manera de que este país avance ni de que aumenten nuestros derechos como ciudadanos. Nos toca pensar, en lugar de conformarnos con reírle la gracia al que no piensa como ocurre ahora.

Vivimos en un mundo de mentiras. Con informaciones falsas se nos manipula. En ocasiones se rectifican, pero el daño ya está hecho y el objetivo que perseguían conseguido. A quienes están convencidos de que todo vale por acabar con el otro, no les importa la verdad, solo denigrar y calumniar. Y sobre todo les importa su bolsillo, vender periódicos

11 M el día que murió el periodismo en España, porque dejó de ser información y se convirtió en bulo, mentiras y tergiversaciones. Se salvan honrosas excepciones.

Muchos de quienes ese día actuaron mintiendo han creado una escuela a la que sufrimos a diario. Y lo más indignante es que sus mentiras les encumbraron a las teóricas cimas de esa profesión: Pedro J. director de El Español, García Abadillo director de El Independiente, Jiménez Losantos en es.radio, Joaquín Manso director de El Mundo, Manuel Soriano está en Madrid Network (done antes estuvo Ayuso), y Cayetana Á. de Toledo hoy portavoz adjunta del PP. Todo un ejemplo de cómo funcionan los poderes en nuestro país.

Paradójicamente hoy creo que se celebra el Día internacional del cerebro. Menudos cerebros interesados