jueves, 30 de abril de 2020

Diario del coronavirus 90

La moda de los "Test masivos" (III)
Corea del Sur.-
El otro país con el que es habitual comparar a España es con Corea del Sur. También este país produce sus propios kits diagnósticos y tiene una industria biotecnológica de las más importantes del mundo. Conviene hacer un apunte histórico y recordar que en ese país se produjo en 2015 el brote del coronavirus MERS, lo que les ha supuesto sin duda, una experiencia de lo que es una pandemia de coronavirus, y gracias a eso organizó un sistema descentralizado de testeos.
Pero eso en ningún modo significa, que se haya testeado a cualquier coreano/a desde el principio, ni tampoco que haya seguido criterios que difieran mucho de los alemanes. Lo que si ha sido muy diferente es su estrategia. Y lo ha sido gracias a algunas particularidades idiosincráticas muy difíciles de reproducir en Occidente, y creo que impensables en España.
El 20 de enero se confirmó el primer caso de coronavirus Covid 19 en Corea. Lo que hizo el gobierno coreano fue, aislar a la persona enferma y rastrear a todos sus contactos para también aislarlos. Hasta el 19 de febrero, la cantidad de casos fue incrementándose, a razón de unos 20 casos por día, lo que indicaba que la pandemia en Corea estaba controlada.
Desde la aparición del primer caso (20 de enero) y hasta el 19 de febrero, habían realizado 10400 test. Curiosamente, en el primer mes en España, habíamos realizado más test que ellos. Sin embargo, hasta ese momento tuvo muchos menos casos que nosotros.
Si en ese primer mes testeó como nosotros, surge una pregunta: ¿Qué hizo diferente Corea para controlar la pandemia mejor que nosotros? Aunque muchos crean y afirman en todos los púlpitos o micrófonos que tienen a su alcance, que lo que hizo fue hacer miles de test de manera masiva, lo cierto es que Corea no testeó a todo el mundo, sino que lo que hizo fue montar un sofisticado sistema de seguimiento de los casos confirmados, consistente en cruzar datos de los infectados con los del resto de la población para ver con quiénes se cruzaron, hacerles el test y aislarlos en cuarentena.
Cualquiera nos preguntamos, por cómo pudieron hacerlo. Pues eso fue posible por tres particularidades o singularidades de Corea que prácticamente en ningún otro país se dan: una que son el país con mayor proporción de pagos con tarjeta de débito/crédito del mundo; otro segundo que son uno de los países con una mayor cantidad de teléfonos por persona del mundo (Corea presume de tener más teléfonos que personas) y a través de ellos sus ciudadanos pueden ser rastreados con gran precisión; y una tercera y última, que tienen una tecnología de vigilancia pública sin parangón, porque Corea tiene funcionando más de un millón de cámaras de vigilancia instaladas en lugares públicos.
Utilizando esta tecnología de vigilancia y rastreo de sus habitantes, con los datos procedentes de esos tres elementos fácilmente rastreables los dos primeros, y la evidencia de los vídeos de vigilancia, Corea hizo lo que llama "track and test" que significa algo así como ”rastrear y probar”, y mantuvo una cifra de testeos moderada hasta entonces, porque no hizo falta hacer test por hacerlos.
Pero la cantidad de test empezó a aumentar a partir de entonces, hasta llegar a hacer más de 11 mil test al día, es decir, en un día hicieron más test de los que estaban realizado en todo su primer mes. El motivo para ese incremento, además de algo fundamental como es poder disponer de suficientes test, es que se disparó la cantidad de casos, atribuidos en su mayoría a la conocida como "paciente 31", una señora que asistió a una ceremonia masiva, con de una reunión de su comunidad religiosa en la ciudad de Daeogu, que cuenta con dos millones y medio de habitantes. El gobierno coreano, entonces, empezó a perseguir y testear a todos los miembros de esa religión, hubiesen asistido o no a la ceremonia.
Ese es el motivo por el que se empezó a aumentar la cantidad de test, aunque usando siempre el mismo criterio para realizarlos: contacto con casos confirmados verificados en los sistemas de vigilancia. No me imagino la que se montaría en la opinión pública española si se produce esa vigilancia en los lugares públicos. Es bueno recordar que hablar de seguimiento aquí (solo con existir el rumor de poder realizarlo a través del móvil, provocó que quienes ahora ponen de ejemplo Corea, y exigen los test masivos, montas en inmediatamente un pollo y recomendaran que todo el mundo pusiese su móvil personal en modo avión ¿lo recordáis?.
La conclusión que obtenemos es similar a la de Alemania, que la cantidad de test que se hacen, en sí misma, no indica nada. Que para ver como han controlado la pandemia, hay que controlar muchas más variables, para saber lo que en verdad ha hecho un país. Muchos no se creen los datos de China; tampoco los de Corea; algo más, pero tampoco los de Alemania por tener muy pocos muertos; pero se pone el grito en el cielo acusando de manipulación en los nuestros, que ya tampoco muchos españoles se creen.
Seguramente nosotros hemos cometido muchos errores, pero no todos. Pero no es menos cierto, que los demás habrán tenido muchos aciertos, pero tampoco en todo. La estrategia de cada país varía según una serie de factores clínicos y epidemiológicos, que es lo que la propia OMS recomienda. Por eso, empeñarse en comparar la cantidad de test de un país, sin ver si hizo un confinamiento total al inicio, con los de otro que tardo meses en hacerlo, y que ahora tiene una tasa alta de positivos, es un sin sentido. Ni aporta nada, ni nos dice nada sobre cómo esta ese país hoy.
Tampoco parece que el modelo de afrontar la pandemia en Corea sea extrapolable a España, ni se puede afirmar que en Corea se han realizado test masivos y ese es el motivo principal para sus resultados. Afirmar eso de Corea,es también una falsedad. Interesada por supuesto.

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