Es curioso que sea en el PP donde más convencidos están del fracaso de la investidura de Feijoo. La presidenta madrileña la primera: “Animo a Sánchez a ser sincero por una vez en su vida política, que tenga palabra, convoque elecciones y se presente con el proyecto que -ahora- quiere para España. Porque ningún español ha sido consultado”. Al parecer desconoce que según el art 115.3 de la Constitución, un presidente de gobierno no puede convocar elecciones en su primer año de legislatura, y que según el art 21 de la Ley de Gobierno un presidente en funciones no puede disolver las cámaras. Cualquier dirigente político debería conocer la Constitución.
No le está siendo fácil a Feijoo digerir los resultados del 23J, y con estos compañeros de partido, no necesita enemigos. Muchos piensan que ya está amortizado, aunque sigue siendo el candidato. Ya ni siquiera repiten como al principio, que Feijoo había ganado las elecciones.
Todo este ruido forma parte de la estrategia para una repetición electoral, tantas veces como sea necesario, hasta que el PP pueda gobernar. La otra opción es un tamayazo que nunca puede descartarse ante las artes de Génova 13, pero todo apunta a que las exigencias de Junts son difíciles de asumir porque pueden resultar difíciles de explicar como negociación o como cesión para gobernar.
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