lunes, 10 de enero de 2022

LOS MAYOS

 1 de mayo

Hoy se han administrado en España 504.823 dosis, nuevo récord en un día. Hasta hoy viernes son ya un total de 16.364.595 dosis de las vacunas contra el covid-19. Esto representa el 92,9 % de las distribuidas, que ascienden a 17.610.225 unidades. Un total de 4.689.766 personas ya han recibido la segunda dosis lo que supone el 9,9 % de la población española. Un total de 11.763.360 personas han recibido al menos una dosis, el 24,8 % de los españoles.


Mientras aquí hay quien aún le ríe las gracias y las ocurrencias, fuera de nuestro país califican a Ayuso como “la nueva Le Pen” o “la Trump española”. Algunos deberían preguntarse el porqué, antes que apoyar con su sufragio a algo como la simpleza de que pueden tener el bar abierto.
Si lo que se vota es un proyecto de Comunidad, no debería ser fácil decidirse a apoyar un programa consistente en una foto de la candidata y el resto en blanco. Ver como hay quien no se cuestiona que propuestas está apoyando con su voto solo es motivo para preguntarnos ¿en qué sociedad nos hemos convertido? Estamos en la sociedad de la imagen, donde el mejor candidato es el que más veces consigue salir en los medios, aunque para ello deba hacer el pino con las orejas.
Lo vimos en Trump y lo estamos viendo con Ayuso, y es de esperar que como cayó Trump, caerá Ayuso. Puede que la factura que ahora paguen los trabajadores madrileños, acabe pagándola el PP y en concreto su presidente a no mucho tardar. En EEUU lo está pagando el partido republicano y su nueva dirección. Si las políticas de Ayuso son las que el PP plantea para el resto de España, esa moto no se la compraran en muchas CCAA, en las que su PP regional es mucho más serio y sensato que el PP de Ayuso y MAR. Algunas voces internas deben empezar a pensar, que, aunque puedan ganar las elecciones del día 4, dentro de la derecha se ha empezado a perder el juicio si lo que se quiere es ser una derecha del siglo XXI y no del siglo pasado. La victoria, de obtenerla en Madrid, puede ser para el PP pan para hoy y hambre para mañana en el Estado, aunque ya venden que es una victoria sobre el gobierno del Estado.
Si intentamos ver a que se está jugando en la derecha española, parece claro que hacer la competencia a Vox no puede ser el objetivo de un partido que se dice de gobierno. Mejor, más bien parece una invitación a pensar que todo es una cortina de humo, una forma de desviar la atención sobre lo que realmente les importa: privatizar todo lo público que puedan durante el tiempo que estando en el gobierno puedan. Algunos en Madrid deberían recordar, aquello de “vinieron por los judíos, pero como yo no era judío, me calle”. Puede que a no mucho tiempo, vengan por ellos y ya sea tarde. En algo hay un acuerdo general en la opinión pública: la candidata no es precisamente un genio. Más apunta al perfil de niña caprichosa, que cuando se empeña en algo, se olvida de lo que debe hacer. Pocos pueden pensar en serio que se trata de una lideresa.
Pero esto es la democracia, cada uno vota lo que quiere, y bien haría la izquierda en reflexionar y hacer una autocrítica de porque esto sucede en la capital del reino. Igual concluyen que aquellos polvos trajeron estos lodos. Puede que a la izquierda nadie le perdone sus promesas incumplidas y a la derecha nadie tenga que perdonarle lo que todos saben que harán: favorecer a una parte pudiente, aunque ello lleve a la semi esclavitud a la mayoría. La izquierda en el gobierno, se ha preocupado demasiado por las formas amables, por el lenguaje, por el discurso, y poco por acabar de una vez con un modelo fiscal injusto o por una legislación laboral que favorece a los pocos a los que la derecha siempre protege.
Al final puede que acabemos concluyendo que el problema no son los partidos políticos o sus candidatos, sino los ciudadanos, capaces de dejarnos engañar sin preguntarnos si lo que nos acaban de decir es cierto o es un bulo. Es el tiempo de los bulos, del “miente que alguien se lo creerá”. De estar preocupados más por fastidiar al otro que por salvarnos nosotros. Acostumbrados a que los lobos sean nuestros pastores. A olvidar 25 años de abusos, de corrupción y de trampas y tamayazos, de recortes de derechos, de cuidar más unos barrios que otros, de las Gurtel y las púnicas, todo ellos por el modesto precio de que nos dejen ir al bar para tomarnos la cervecita a la madrileña. Promesas de no pagar impuestos para los que tienen, aunque ello suponga dejar sin servicios a quienes carecen de posibilidades de pagarse un colegio o un hospital.
A tres días del 4 M, mi esperanza está en que de las encuestas es mejor no fiarse. Que todo puede pasar. Que lo peor que puede hacer la izquierda es sentirse derrotada antes de ir a las urnas. Que, seguro que hay gente tradicionalmente votante del PP, con fallecidos en residencias, que sabe que el gobierno de Madrid en dos años se ha limitado a una sola ley y ni siquiera ha sido capaz de aprobar unos presupuestos, y que no se traga el populismo de la candidata, y decide quedarse en casa.
Mi desesperanza es que siempre detrás de ese populismo de la derecha está la iglesia, y el poder económico, y eso mueve mucho, incluso hasta consigue que se celebren unas elecciones en martes. La banca sigue ganando dinero y en nuestro país, y en concreto en Madrid, aumenta el número de ricos, tanto como lo hace el de quienes tienen que colocarse en las colas del hambre. Pero eso parece importar menos que las soeces frases de la candidata, su soberbia o su arrogancia. O que represente a un partido especialista en medrar.
A lo único a lo que teme el PP de Ayuso, es a que la afluencia a las urnas sea tal, que los barrios pobres dejan en mantillas la participación de aquellos en los que sea martes o domingo, no está permitido que alguien falte en la fila con su papeleta.
Ya veremos.


2 de mayo
Sería de agradecer haber vivido una campaña de propuestas, pero eso era mucho pedir, cuando toda ella se ha basado en la simpleza de la frase hecha, y la dicotomía entre blanco y negro.
Se agradecería que los medios de comunicación se hubiesen centrado en transmitir los programas y propuestas, en lugar de haber actuado como parte interesada en que se produzca el resultado deseado por sus dueños.
Se hubiese agradecido, que en lugar de parecer una campaña de elecciones municipales en la capital, alguien se hubiese acordado de cual es la situación en el resto de poblaciones de la Comunidad de Madrid.
Se hubiese agradecido que el debate político se hubiera centrado en algo más que en sí se puede tomar una cerveza o no, olvidándose de las cifras de fallecidos en las Residencias de Mayores.
Sólo se ha hablado de lo que interesa a los poderes económicos que están detrás de los medios de comunicación, de lo que interesa a sus propietarios.

4 de mayo
al y como indicaban las encuestas el PP ha ganado las elecciones en Madrid. Enhorabuena porque es la voluntad de los demócratas madrileños. Querer hacer ver ese resultado como la imagen de la realidad de toda España, es olvidar lo que les ocurrió en Catalunya o que necesitan a Vox en muchos sitios para gobernar. Es no querer ver la realidad. Mañana la realidad puede ser otra. Hoy el PP ha ganado en la Comunidad de Madrid, que no es poco, pero tampoco tanto.


5 de mayo
La libertad de las cañas ha triunfado en Madrid. Isabel Díaz Ayuso se lleva esta noche el mejor resultado en una década para el Partido Popular. 65 escaños, 44,4% de los votos. Hay que remontarse a 2011 para encontrar una victoria más amplia, y aquel era un mundo que hoy no existe: el del bipartidismo. Ayuso no solo duplica su resultado de hace apenas dos años sino que logra para la derecha uno de sus triunfos más holgados en la región.
La estrategia de Ayuso contra la pandemia no ha funcionado en la economía: los datos del paro, o del PIB, no son especialmente buenos en la comunidad. Tampoco en salud pública: Madrid es la autonomía española con más exceso de mortalidad. Pero sin duda esa estrategia ha sido determinante para la victoria arrolladora de este martes, un éxito que en gran medida se explica por su apuesta por abrir la hostelería, contra el criterio de todos, también de otros gobiernos autonómicos del PP.
No es tampoco una noticia inesperada: hace más de un cuarto de siglo que la derecha gobierna la región. Pero no es solo una cuestión de izquierda vs derecha. El discurso populista de Ayuso ha entrado a fondo en los votantes poco politizados, menos ideológicos, que se definen de centro y se mueven entre distintos partidos o la abstención. Es ese tercer bloque –alrededor del 20% de la sociedad– el que ha encumbrado a Ayuso con un resultado, para la derecha, excepcional.
Ignacio Escolar.
En mi opinión, el fascismo cabalga a lomos del cortoplacismo, y parece que la izquierda no se ha dado cuenta de esto.

Creo que se debe respetar el resultado de las urnas siempre, analizar porque su resultado fue favorable o desfavorable, y aprender siempre para la próxima. Eso como mínimo.
Pero dicho lo anterior, el mensaje que ha emanado de las urnas, tiene muchos componentes, y de forma muy especial para los sanitarios. Porque según pudimos ver, las celebraciones de ayer no eran de riesgo,no debían parecerse a las de los aficionados del fútbol, ni tampoco a las tan cacareadas y contagiosas del 8 M del pasado año. Ayer celebraban el 4M y eso nos enseñó, que la coherencia no está en guardar las distancias, sino en acercarnos porque si lo hacemos como ayer, la bandera nos protege; ahora la coherencia es que se deben levantar todas las restricciones, se debe ampliar al máximo los horarios de todos los establecimientos, y recuperar los máximos aforos de los locales y la hostelería; lo coherente según las urnas ayer, es quitar el toque de queda cuanto antes, para que podamos disfrutar de los bares sin preocuparnos ni de mascarillas, ni manos ni distancias. Las urnas de Madrid nos han lanzado el mensaje con absoluta nitidez: desde hoy hay que ser libres a la madrileña. El virus ha muerto, viva el virus. Lo de proponer prorrogar el estado de alarma es innecesario y las CC AA que lo pedían lo hacían en broma, no en serio.
Así que ya libres a la madrileños, que nadie se preocupe ya de la pandemia, que si alguien enferma y tiene que ser atendido en los centros de salud, u hospitalizado, o ingresar en las UCIs, ya nos ocuparemos los sanitarios como podamos, aunque falten recursos materiales y personal. Que eso no es problema de los gobiernos autonómicos sino de los sanitarios. El mensaje del pueblo de Madrid ha sido muy claro: no desea ser molestado por nuestros problemas de sanitarios, ni incordiar con nuestras opiniones alarmantes y contrarias a la economía.
Porque además, las urnas ayer también nos enseñaron, que si los gobiernos de todos los países hubiesen actuado a "la madrileña", seguro que ninguno de los mayores de sus residencias habría fallecido, que no estarían llenas las UCIs, y que la pandemia no existiría como siempre han afirmado M Bosé o Nacho Cano que son los únicos que entienden de coronas y de virus, y así viviríamos en libertad.
Las urnas han hablado y al hacerlo ya sabemos que desaparecerán las colas de mantenidos por ese partido tan libertario y arrasador. Las urnas nos han dicho que desde hoy, ya puede los madrileños llamar a su centro de salud y tendrán su cita de inmediato.
Los resultados son meridianamente claros:
¿Para que cambiar si esto es lo que queremos en Madrid y en toda España? Porque Madrid es España, y España es Madrid y son los vecinos los que eligen el alcalde, y una manzana es una manzana, aunque sea en diferido.


9 de mayo
Anoche, a las 00:00 horas terminó el estado de alarma.
Parece por lo visto en algunas ciudades, que se hace necesaria la expresión ¡ Que Dios nos coja confesados! Parece que todo el mundo se ha relajado en continuar con las medidas de precaución: distancia de seguridad, mascarillas, aseo de manos y respeto al número máximo de gente para reunirse. Si se produce un repunte de contagios siempre tendremos al gobierno central para responsabilizarlo. Antes, para las CCAA, lo malo era el estado de alarma, y AHORA lo malo es que no tenemos estado de alarma y esas CCAA han de tomar decisiones y la responsabilidad de lo que suceda será de ellas. Claro que vamos a ver a algunos presidentes autonómicos como verán también al gobierno central único responsable de todo. Hasta de la muerte de Manolete.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

CAMBIO DE FASE

Se acabo la fase uno con Feijoo. Entramos en la siguiente fase, esperemos que, con Sánchez, porque el monarca es competente para darnos sorp...