miércoles, 30 de agosto de 2017

PONGAMOS QUE HABLO DE RAJOY


Mariano comparece, pero a la vez que calla. Los demás son para él unos inquisidores que no buscan la verdad, que solo quieren obligarle a comparecer. Sabe que debería explicar lo que sabe de la Gürtel, pero siempre le dio buen resultado limitarse a criticar a la oposición, No piensa en responder, sino en debatir con quien le interpela. Al menor descuido, hasta les dará un mitin.  Dirá que está cansado de comparecer, pero no se cansa de decir, porque nunca dice nada. Le pedirán que dimita, pero no les escuchara.

Hoy se ha mostrado como un auténtico maestro del arte de no parar de hablar para no decir nada claro. Su defensa inexpugnable: una mayoría de los españoles me apoyan en las urnas, chúpate esa. Por eso se muestra chulesco, él puede reírse de los de a pie, no le importa saber que lleva razón la oposición y que tendría que haber dimitido. Para eso están las falacias. Falacia tras falacia. Y si no Hernando vendrá con más falacias todavía.

Esquivador de asuntos, saliendo por peteneras. Sabedor de que a su favor juega una televisión de contenidos insulsos que funciona mañana, tarde y noche. Solo le molesta que, pese a todo, no puede evitar que la sospecha recaiga sobre él y sobre su partido, Pero no importa porque esto es su España, la una, grande y libre, la diferente. No le importa que en cualquier país con una democracia de calidad, un partido con tantos rincones oscuros como el suyo, ya estuviera ilegalizado. Aquí no, esta es su España.

Ya se sabe que el acostumbrarse a mentir, enseña a no decir nunca la verdad. Ya se sabe, que si aplaudes al criminal, seguirá cometiendo crímenes. Pero aquí parece que no se sabe. Puede parecer vomitivo por tolerante, o vomitivo por ser un inútil que no se entera. Puede ser mentiroso por faltar hasta a su propia verdad. Puede ser un testigo corrupto porque miente. Pero le veremos prepotente, soberbio, presidente de una mala democracia en la vieja Europa, donde siete millones de votantes han llegado a ver como cosas normales la financiación ilegal, el lavado de dinero, los sobresueldos en negro. Por eso se permite dar lecciones de legalidad y democracia en sus viajes por lo largo y ancho de este mundo (siempre le gusto más el Capitán Tam que Locomotoro).

Esa es su estrategia, la del “no me acuerdo, no era mi labor, lo desconozco, etc.”, Siempre le ha salido bien, y no le importa aparecer como un impresentable, cínico, que nos avergüenza a todo el país hasta a quienes le votan. Su estrategia es la buena, que para eso le nombraron  jefe de sala de un chiringuito infame. A veces se da cuenta que empieza a mostrarse un tanto mediocre, pero no le importa, convencido de que en política el fin justifica los medios. Con su estrategia ha convencido a muchos de que en política todo está corrompido, y él se ha visto obligado a transitar por ese camino.

Por eso no se siente responsable de que se robe dinero público, o se destruyan discos duros, o se recorten los brazos de la  justicia, o se dificulten las investigaciones policiales, o de que sus amigos paseen en los paraísos fiscales. No le importa que el mundo vea una España triste y corrompida, todo vale si él es el presidente. No admite que un niñato le llame indecente, aun sabiendo que se ríe de esa España y de los españoles. La respuesta es mostrarse arrogante, considerar que toda la oposición es una panda de pardillos, faltos de estrategia e inteligencia.


Él es Rajoy, el registrador de la propiedad. Y siempre ha tenido muy claro, que la sinceridad en España está sobrevalorada. No es capaz de imaginarse un país donde todos sus políticos digan la verdad- Tampoco necesita imaginarlo, porque sabe que los votos que recibe, sirven para taparlo todo, hasta sus vergüenzas.

sábado, 26 de agosto de 2017

RECOPILACIONES


BOLARDOS
A muchos políticos, parecen importarles poco las reacciones sociales (tanto las negativas como las positivas), que se han suscitado tras los tristes acontecimientos de Barcelona. Muchos parecen reducirlo todo a la gran cuestión latente en púlpitos y alcaldías: ¿bolardos sí o bolardos no?.
Este es un debate que no nos lleva a ninguna parte, pero sirve como cortina de humo, porque mientras se habla de esto, nadie tendrá que explicarnos en donde se cometieron los errores de prevención de nuestro sistema de seguridad que ha permitido que durante meses ese grupo de asesinos campara por sus fueros.
Los escuchas en los medios, y están convencidos que la solución al terrorismo yihadista, es convertir calles y plazas en una pista de obstáculos contra una posible acción terrorista. Y si de paso desgasto al rival político por no haberlos instalado ya, pues miel sobre hojuelas. Ninguno de estos sabios de la seguridad, parece preocuparse por cómo se tendría que reaccionar en esos mismos lugares ante otro tipo de emergencia que precise bomberos, ambulancias, policías, etc. y encontrarse que no puedan acceder esos servicios por esos obstáculos. Ellos serían los primeros en poner el grito en el cielo por su presencia porque harían difícil una evacuación en esa emergencia.
Mejor harían en dejar a los técnicos buscar las soluciones. Mi pregunta no es ¿bolardos sí o bolardos no?, porque visto cómo se gestiona lo público en España, la única pregunta que me sugiere esta polémica es simple: ¿De quién será la empresa que fabrica los bolardos?
Buenas noches

INDIFERENTES
En un ataque aéreo, los saudíes matan a más de 40 personas en un hotel de Saná (Yemen). Esta matanza no está ni en las noticias de occidente.
Debe ser porque no son como nosotros, los humanos. Los de aquí sí que son de la humanidad. Nosotros nos limitamos a exportar las armas a Arabia. Para que las usen, ya no es cosa nuestra.
Que descansen ustedes.

DESPROPORCIONANDO LAS COSAS
Tenemos más policías por habitante que los demás países europeos, pero menos profesionales sanitarios y menos maestros por habitante que ellos.
Con el miedo que generan las informaciones manipuladas post atentado, ya veréis como algún fanático de la seguridad estará pensando aumentar los policías.
Lo malo es que para que las cuentas le cuadren, recortaran en sanidad y educación, que serán así, víctimas también del terrorismo.
Si no, al tiempo.

EL TURBIO NEGOCIO DEL AGUA
Ilegalidades, información oculta, mediciones trucadas, robo de agua, trato de favor a grandes empresas…
La gestión del agua en la cuenca del río Segura está salpicada de malas prácticas e intereses creados. Diez años después de la primera vez que lo denunciamos, hemos vuelto a viajar hasta allí para documentar esta trama del agua que parece sacada de una película de mafiosos.
“Me amenazaron con una pistola en la boca diciéndome que si continuaba me iban a quitar del medio”, cuenta Pedro, agricultor que dice ser víctima de un grupo de empresarios y del Ministerio quienes, aprovechándose la infraestructura del trasvase Tajo-Segura, amplían regadíos y le roban el agua a miles de ciudadanos.
María es otras de las personas afectadas por esta trama que hace que sí haya agua para unos pero no para otros: “Si tú te enfrentas a la gente del agua, te pueden cerrar el chorro y no riegas. Ellos tienen una llave y un mando para hacer y deshacer lo que quieran porque tienen el poder del agua”, nos cuenta.
Como ellos, otros pequeños agricultores de la zona denuncian que no tienen acceso al agua porque esta va a parar a las grandes empresas hortofrutícolas con la complicidad de las administraciones. La Confederación Hidrográfica del Segura manipula los datos para sostener un falso déficit hídrico y prioriza el acceso al agua para cultivos intensivos y la especulación urbanística.
Es decir: para resorts, campos de golf, piscinas en chalets y otros proyectos urbanísticos de la burbuja inmobiliaria sí hay agua, pero para los pequeños agricultores, ganaderos y PYMES no.
Desde Greenpeace creemos que otro Segura es posible, que otro modelo de gestión de agua es necesario. Juntos podemos lograr un escenario donde la economía de esta región siga creciendo sin sobreexplotar la cabecera del Tajo, ya de por sí deteriorado, con un trasvase innecesario.
Ayúdanos a seguir denunciando estas prácticas corruptas y que el agua no sea un negocio que beneficie a unos pocos.
¡Hazte socio/a de Greenpeace!

MANIPULANDO

Si recopilas todo lo publicado sobre el atentado terrorista de Barcelona, y compruebas que cosas son mentira y cuales manipulación, detrás siempre te encuentras al PP. No tienen hartura, y no aprendieron nada con el 11 M y su gestión de la información.

viernes, 18 de agosto de 2017

HAY QUE SEGUIR ADELANTE.


Pocas cosas, o ninguna, harán que las víctimas directas e indirectas de la barbarie de ayer, tengan capacidad para asimilar lo ocurrido y aprender a vivir con ello el resto de sus vidas. Vivo lejos del lugar de los hechos, pero ayer noche, sentía como si una ciudad viva en la que me encanta caminar cuando voy, se hubiese parado por el golpe helado del fanatismo.
Pero es hoy viernes, cuando creo que la impotencia nos ahoga más y se nos revuelven las vísceras. Por eso creo que también es hoy, cuando resulta más importante que nunca, estar al lado de todas las víctimas inocentes que hay cada día. Aunque nos duelan mucho más las de Barcelona que las de cualquier otro lugar del planeta. Porque aunque todas ocupen los noticiarios, aquellas nos parecen ajenas. El terrorismo, es una parte urente de la humanidad, un signo del momento que nos ha tocado vivir, el error de quien se adentró en un sendero que parece sin retorno. Pero es un problema de todos no solo de las víctimas.
Solo recurriendo a la reflexión, a la inteligencia, con valentía y sin dejarse amedrentar ni coaccionar, con la paciencia de Job, con la justicia por principio, y pensando que todos los pueblos del planeta tienen los mismos derechos, seremos capaces de frenar esta locura. Avanzar en la lucha contra el terrorismo, es poner ante la justicia a los terroristas para juzgarles. Pero también lo es acabar con las políticas de expolio y dominación que hoy imperan, y o se va por ese camino pronto, o cada día que pase será más difícil transitar hacia su erradicación.
La humanidad no puede continuar dominada por la absurda dicotomía de “o mercados, o precariedad”, que es el alimento de la galopante xenofobia con su jinete el racismo. Nada es casual, ni una coincidencia que la inestabilidad política, las migraciones de refugiados y las hambrunas coexistan todas a la vez en el planeta. Solo intentando analizar sus causas, se puede llegar a entender -nunca a comprender ni a permitir-, el porqué de la radicalización de determinados sectores de otras sociedades. Es una vergüenza, que mientras vemos que no ha terminado un conflicto, ya se ha iniciado otro, y que miremos hacia otro lado. 
Hoy es un viernes duro y triste, pero que no puede hacernos olvidar que todas las víctimas son consecuencia de la sinrazón, que nos hace imposible entender que le pasa a los ciudadanos de un mundo hoy podrido. Todo tiene su causa, su efecto, y resulta rentable para alguien.

Pero los asesinos no nos pueden parar, y aunque hoy duela mucho, se debe seguir adelante.

SE BUSCA CANDIDATO O CANDIDATA

Elegir a quien debe ser el candidato/a a Secretario General, no es algo que desde principio se realice por los militantes, aunque sean luego éstos quienes en las urnas dirán si la elección fue acertada o no. Esa designación se suele realizar en los despachos de los partidos y el procedimiento de elección se gesta durante mucho tiempo, pero siempre se espera al momento adecuado para hacerlo público. Creo que es un ejercicio políticamente saludable, intentar reflexionar sobre cuáles son las características que se deben buscar en la persona que opte a ejercer el liderazgo socialista, y más aún, en estos tiempos precongresuales.

No es fácil hacerlo cuando en las redes parece confundirse al líder político con los Messi o Ronaldo, porque más que valoraciones políticas, asistimos a un verdadero y desmedido “forofismo”. Pero aún a riesgo de que se me tache de maniqueo o de mantenerme en una lucha entre buenos y malos, y de que unos no las entiendan y otros no las atiendan, creo que merece la pena analizar las cualidades que son aconsejables buscar en los candidatos/as a ejercer esos liderazgos en el PSOE.

No hay una fórmula mágica y única para todas las contiendas electorales, pero sí unas cualidades y aptitudes que no pueden faltar en un candidato/a que tenga posibilidades de ser elegido o elegida: honestidad, competencia, integridad y capacidad de liderazgo, son condiciones que los ciudadanos consideran imprescindibles. No entraré en el debate de, si el político nace o se hace, pero no se puede negar que para transmitir esos valores democráticos, el candidato/a debe mostrar: carácter, honradez, experiencia, dinamismo, cercanía, humildad, generosidad, sentido del humor, capacidad de emocionar, empatía, talento para ilusionar, ¡para motivar!, saber escuchar y buena oratoria, entre otras. Para algunos solo serán cualidades recomendables, pero para otros son exigibles.

Serán diferentes los factores, pero es imprescindible saber leer el contexto electoral, sin obviar la importancia que pueden tener algunos factores externos en el momento en que se producirá la votación. Aun reuniendo el candidato/a todos esos requisitos, nada garantiza que el nuestro es el mejor, porque en el resultado final va a influir la oferta que se le oponga, y esa valoración global dependerá también: del momento político, de si se viven tiempos de cambio o de estabilidad, de si se precisa un líder fuerte o un perfil de negociador, de si existe hartazgo de la forma de hacer política, de si el escenario es de desideologización o de interés por la política, etc. Todo son factores que hacen que la elección de cuál es la mejor opción sea una ecuación de difícil solución.

A lo anterior se añade el ámbito de la elección (regional o provincial) porque el contexto es diferente y, en ello, influye también la imagen que tiene la sociedad de los partidos y de los políticos -hoy, es muy mala, agravada por los casos de corrupción que a diario ven la luz, tanto políticos, como institucionales, o del ámbito financiero-. Y en los últimos años debe considerarse otro factor, y no menor, como lo es la aparición de nuevas formaciones políticas.

Todo lo expuesto pesa, pero el gran condicionante es que la gente necesita alguien en quien confiar y, por eso, no se pueden dejar en segundo plano las cualidades profesionales del candidato/a, ni las individuales de la persona. Las primeras van a transmitir a los electores qué capacidad tiene para ejercer el cargo, su grado de preparación, su nivel de experiencia y su capacidad de análisis y de gestor. Las individuales, son las que le van a diferenciar de sus adversarios: hombre o mujer, si “se ha hecho a sí mismo”, empresario de éxito, trayectoria como activista social... Todo importa para construir un relato personal.

Y qué decir de la imagen personal que hoy ha adquirido una importancia fundamental y puede hacer que, por ella, un candidato gane votos o los pierda. Un candidato/a nunca debe aparentar ser lo que no es, porque el ciudadano rechaza más la apariencia, que los defectos innatos. La imagen debe ser acorde con lo que se dice y se hace y nunca un disfraz para participar en política. Son conocidas las dicotomías entre: si con traje o sin él, con o sin corbata, descamisado, etc. En definitiva, coherencia, entre “vivir como se piensa”, frente al “pensar cómo se vive”. 

Pero no todo dependerá del candidato/a. Tan importante como él, resulta el equipo de personas del que se rodea, que debe compartir todo lo dicho para el candidato/a, y de no ser así, el equipo se convierte en el punto débil de la candidatura por donde será atacado por sus adversarios. El candidato/a debe dirigir y gestionar ese equipo, para que trabaje con entusiasmo. El complemento a candidato y equipo, es una estrategia definida, para que incline la balanza a nuestro favor.

Por último, no olvidar que pese a los esfuerzos por transmitir una imagen y un proyecto coherente, la percepción que de ambos tengan los ciudadanos no va a depender totalmente del candidato y de su equipo. Un gran proyecto y un buen candidato pueden no percibirse así y, en comunicación política, ya se sabe, que la percepción del votante es la única realidad existente, y todo lo demás es humo.
He aquí, a continuación, un decálogo de cuestiones sobre este asunto, para la reflexión del lector interesado.

Una.- ¿Cómo encajarán las mujeres del partido, de nuevo, que un hombre vuelva a dirigir el partido, y no se opte por una candidata?
Dos.- ¿Por qué no apostar, de una vez por todas, por una mujer para romper con el predominio masculino de candidatos en la región y en las provincias?
Tres.- ¿Dos meses o tres después, siguen tan equilibradas las dos formas de entender el Partido, como equilibradas estuvieron en las primarias?
Cuatro.- ¿El militante considera que los procesos electorales contarán con una absoluta neutralidad por parte de las  actuales ejecutivas?
Cinco.- ¿Qué es exigible por parte de los militantes en las actuales circunstancias políticas de Castilla-La Mancha a los candidatos/as?
Seis.- ¿Será suficiente el curriculum de los candidatos/as, o se les debe exigir, además, una vasta experiencia?
Siete.- ¿Conocemos si tienen compromisos los candidatos/as que pudiesen condicionar sus decisiones?
Ocho.- ¿El candidato/a ha demostrado, en anteriores puestos de responsabilidad, que  sabe afrontar problemas graves de buenas maneras y los resuelve?
Nueve.- ¿Tiene el candidato/a un discurso fluido y coherente capaz de arrastrar a masas y que llega a la gente con facilidad?
Diez.- El líder que necesita hoy el socialismo en toda Castilla-La Mancha y sus provincias, ¿debe tener dotes como líder, pero ser modesto/a o humilde, de nuestros días, y alejado del perfil de gran personaje? O por el contrario, ¿se necesita un líder tradicional?

A nadie se le escapa que es muy difícil que se den en alguien todas las cualidades expuestas, pero tampoco se nos debe escapar que este partido necesita tener al frente a alguien que no se limite a arengar (aunque sepa apasionar hasta el forofismo), sino a alguien capacitado/a para aplicar lo decidido como modelo de partido en el 39 Congreso del PSOE y, a la vez, esté comprometido e ilusionado en la lucha por un futuro  mejor y capaz de impulsarnos en la salida de la injusticia generada en estas tierras por la desigualdad. 

Solo cabe esperar que a los votantes del PSOE se les ofrezcan, “unos” o “unas” líderes que les escuchen y que se comprometan a respetar los programas electorales. De ahí que sea importante saber si son de ese tipo de políticos los candidatos/a que concurrirán en los próximos meses, porque son de ese tipo de políticos de los que necesita y pide la militancia, harta de acabar eligiendo lo menos malo.

Veremos cuál es el desenlace de la película. Se aceptan sugerencias, porque continuar con perfiles como los actuales, supondría haber hecho un viaje en el 39 Congreso para el que no hacían falta tantas alforjas.


domingo, 13 de agosto de 2017

SILENCIOS CÓMPLICES

  
Difícil es defender aquello en lo que uno no cree. Creerse a pies juntillas, que Diaz, Puig o Fernández Vara, creen de la noche a la mañana, en el nuevo modelo de PSOE salido del 39 Congreso, que ellos son ahora sus cabezas visibles regionales, no es fácil, aunque lo sean porque sus militantes así lo han decidido. Algo similar puede ocurrir en Aragón y en Castilla La Mancha, donde también  son candidatos a continuar en sus respectivas Secretarias Generales regionales, tanto Lambán con Garcia Page.
Pero eso, en una primera fase, no lo deciden los militantes, sino en los despachos. Toca ver el “si te vas, yo también me voy. Si me das yo también te doy”, aunque la decisión que allí se adopte, diste mucho del sentir general, luego se moverán los hilos para hacer confluir esa decisión con la opinión mayoritaria, y así quedará bendecida. Cuando quien lo lidera ni se ha creído, ni cree en el proyecto, difícilmente será santo y seña del mismo, y entre la militancia, en lugar de provocar dolor de pies o de corazón, acaba haciendo que duela la cabeza.
Ver que no han existido alternativas a la continuidad de los anteriores secretarios regionales, o que si las ha habido, no han contado con todo el apoyo que desde la nueva Ejecutiva de Sánchez ellos esperaban (a mi entender), no invita al optimismo de que las haya en otras regiones. Dar el paso para ser la alternativa a Lamban o a Garcia Page, no es algo fácil para quienes se lo deberían y se lo podrían plantear, sino que les envuelve en la duda de si deben hacerlo. Los militantes desean elegir, pero las posibles alternativas, sopesan lo que les supondría la derrota, para sus actuales cargos de responsabilidad.
Pero lo que pocos dudan, es que de no aparecer una alternativa a los actuales dirigentes regionales, por parte de los que apoyaron a Sánchez en esas regiones, dará la sensación entre los militantes, de que la política ha perdido la espontaneidad y la sana ingenuidad, y que sigue en manos de verdaderos profesionales de la misma, gentes capaces de mantenerse en el cargo del que viven, haciendo uso para lograrlo, de todas las componendas a su alcance. La falta de alternativa será un nuevo motivo para perder de nuevo la ilusión, que creían recuperada tras las primarias.
Esta situación me sugiere el concepto de complicidad, de la cualidad de cómplice. No presentar alternativas, convierte a todos los militantes en cómplices, en actores solidarios con quienes ya están, en los mejores conocedores de ellos, de sus debilidades, y de sus fortalezas. No mover un dedo, otorga el papel de cómplices mentales, de entendedores del porque continúan, de ser el complemento a su continuidad incluso sin saberlo, sin ser conscientes de que por nuestro silencio somos autores directos del hecho, aunque solo admitamos ser cooperadores necesarios. En realidad nuestro papel es imprescindible para que eso ocurra.
Un líder para serlo, requiere de una serie de seguidores (aunque algunos parezcan súbditos) a los cuales guiar, sobre los que imponer su mandato. Pero para que eso ocurra, tan necesarios como él, son quienes se sienten cómodos de seguidores, personajes que necesitan ser guiados por un individuo más seguro, más determinado que ellos, alguien que les indique con claridad el camino que han de recorrer, para así no tener que trazarlo por ellos mismos.
Aunque no lo admitamos, los humanos lanzamos más mensajes con los silencios que con las palabras. No necesitamos comentar nada, porque nuestros silencios dicen mucho más. En este asfixiante mes de agosto, algunos han decidido que toca hablar con el silencio, aun siendo algo muy incómodo, sobre todo en el interior de un partido político. Saben que el militante escucha el silencio, pero que también sabe que en los despachos se sigue hablando. El calor puede hacer olvidar que hay silencios que son mentira, que engañan. Pero desde luego, el único silencio que no es normal en estos casos, es el de la calle. No puede entenderse que también en la calle se calle.
Demasiados años en este partido, para hacer mi silencio cómplice, con la desilusión que empieza a notarse en muchos militantes. Que agosto sea mes de vacaciones, no hace obligatorio a los militantes tener que estar todos contentos, ni embobados. Me pregunto, ¿Hasta cuándo se puede permanecer callado en política? Si la pregunta se hace en Albacete, la probable respuesta será, hasta después de feria.

¿Y mientras? Ya me contareis.

martes, 8 de agosto de 2017

LA ESPAÑA MARIANA


Titular de prensa "La justicia investiga la muerte de otra anciana en una residencia pública por "falta de seguimiento médico". Un caso más... Podía ser en cualquier lugar, pero ha ocurrido en la Comunidad de Madrid.
Cuando se permite el hacinamiento de personas, intentando a toda costa llenar todas las Residencias, y así poder presumir de que se ha reducido la lista de espera de solicitantes, sin hacer la correspondiente ampliación de plantilla de personal para atenderlas, la cuerda siempre se rompe por el extremo más débil: los mayores.
No solo ocurre en las residencias de mayores. Al privatizar o pasar a gestión privada los servicios públicos como en el caso de las residencias, pero también en la sanidad, los colegios, o las guarderías infantiles, etc., automáticamente esos servicios convierten en negocios, en los que alguien quiere ganar, cuanto más y cuanto antes, mejor. Y eso solo resulta posible con poco personal, con horarios interminables, y con salarios de miseria. En cualquiera de los casos, todo juega en contra de los usuarios de esos servicios.
Pero eso no importa mucho a estos gobernantes. Lo verdaderamente importante, es que cada año tenemos más turistas en España. Y claro, también tenemos más camareros y camareras de alta formación, incluso con estudios superiores.

viernes, 4 de agosto de 2017

YA NO QUEDABA NADIE QUE DIJERA NADA

No hay que perder la esperanza de que pronto retorne el sentido democrático a una parte de la población, ni de que el español de a pie, se despierte del letargo en que se encuentra. Pero no va a ser tarea fácil, que eso ocurra, y menos con un gobierno presidido por alguien, capaz de negar una evidencia tan enorme como la corrupción de su partido, y parte de esa población le crea. Hay que tener claro, que un gobierno que cohabita con la corrupción, no le hará ascos a cualquier posibilidad de abusar del poder que ejerce, y eso lo dificultará. Estamos otra vez ante dos Españas, la  real y la publicada.

Da igual lo negativo que nos pueda suceder como país, porque no parece que esté ocurriendo aquí, sino en casa del vecino. Tenemos fiscales, que más que fiscales parecen amigos del gobierno. Ministros que, antes de preocuparse de ejercer un bien su responsabilidad, andan preocupados para que no sepamos de sus cuentas opacas en paraísos fiscales. Medios de comunicación, que opinan y no informan, porque son la voz de su amo. Asistimos a intentos de censura en internet o a promulgar una ley mordaza, intentando que los recortes de libertades se asuman como aceptables. El papel de los ciudadanos lo reducen al de marionetas de un teatro, donde los protagonistas no  somos nosotros, sino el gobierno, puesto que aquí impera la ley del más fuerte.

Ya nos pueden apalear a diario  desde Moncloa, que como mucho, llegaremos a sentirnos molestos, pero no haremos nada más. Hoy, lo que en los años setenta se consideraba una forma errónea de afrontar los problemas (escondiendo la cabeza bajo el ala), ahora se ha convertido en la forma natural de abordarlos, dejando que el tiempo transcurra a lo Rajoy. Por eso, nadie debiera extrañarse, si a la más mínima posibilidad. el gobierno aplica el rodillo parlamentario, obstaculiza cualquier iniciativa parlamentaria (o la recurre judicialmente si no consigue frenarla), o mete la mano intentando controlar la justicia, o recorta nuestras libertades, o con dinero público subvenciona a asociaciones ultra católicas, o que mire para otro lado si sus amigos hacen apología del fascismo, etc.

Les da igual porque hace tiempo que en este país se dijo adiós a la división de poderes. Y además les ha soplado a favor el viento de la crisis económica, para imponer la sensación de miedo al desastre, con solo pronunciar las palabras mágicas "inestabilidad política". Siempre, el miedo otorga al que ejerce el poder, toda la libertad de acción para ejercerlo abusivamente. Por eso no es difícil contemplar en nuestros días, como ante un periodista molesto con sus crónicas, se presiona a su empresa para que le despida; que si un profesional de los servicios públicos se queja de las condiciones en las que ejerce su trabajo, se le intente desacreditar personal y profesionalmente; o que si un representante municipal se vuelve crítico y molesto, se le cierre el grifo de las subvenciones a su pueblo, para que se calle.

El miedo siempre consigue callar al contrario, y resulta un arma infalible para precarizar los derechos sociales. La herencia franquista ha dejado la idea, de que el poder no necesita dar explicaciones, que para eso es el poder. Así  se convierte al autoritarismo en un modelo de gestión, y asistimos a que todo se compra y se vende, incluidos los principios, porque hasta nuestra ética se ha tornado comercializable. Todo tiene un precio, aunque cada vez tenga menos valor. En este país nuestro de cada día, ya no se valora el esfuerzo realizado para alcanzar un objetivo, sino el resultado económico final logrado.

Esta es la España en la que los luchadores (los del día a día), por ideales y derechos colectivos, caen en el olvido, mientras se han convertido en héroes domésticos a imitar, a los triunfadores de los shows televisivos. El país donde todos queremos que se investigue la mejor terapia, pero donde nadie se acuerda de que deben tener un salario digno los investigadores. Vivimos una democracia más formal que real, una gran farsa en la que somos manipulados, y en la que hemos dejado de ser exigentes, vaciándola así de valores y de contenido.

Estos meses atrás hemos conocido opiniones de quienes ven aceptable, perdonar el fraude fiscal a una estrella del deporte, mientras, tras asistir a la misa de domingo, son capaces de negarle la asistencia sanitaria al emigrante porque eso supone gastar nuestros recursos. Nos sentimos orgullosos de habernos convertido en los reyes del turismo, a costa de que nuestros agricultores pierdan dinero por trabajar el campo, o que se deslocalicen nuestras producciones. Y lo peor, no solo se llevaron fuera nuestras industrias, sino que con ellas también se trasladó de lugar el poder del parlamento, lo que convierte muchas de sus actuaciones en un fraude a los electores.

Muy a pesar de los ciudadanos, este país ha asumido que lo económico debe estar por encima de lo social y lo ambiental, y eso se demuestra en que las instituciones solo parecen representar a los mercados y sus intereses, en lugar de a los ciudadanos. Pero también el sistema democrático se debilita, por falta de opiniones disidentes dentro de los partidos, que unos más y otros menos, todos se han acomodado a ese nuevo papel. Ahora, los lobos ya no se sienten obligados a ir disfrazados de corderos.

Carecemos de conciencia colectiva, y eso hace que cuando en algún lugar del mundo se vulneran los derechos humanos, creamos que no nos afecta a nosotros.  Solo asumiendo primero esta realidad, estaremos en disposición de entender que nadie puede ni conceder ni quitarnos nuestros derechos, y que es eso lo que nos convertirá en ciudadanos libres y hará nuestra democracia real. Mientras, la calidad democrática parece preocuparnos poco. Así que deberemos acostumbrarnos a que mientras el  dinero se pudre en los bancos,  muchos ciudadanos no tengan que llevar a sus mesas, pero seguirán convencidos de que esto es una democracia.

Muchos parecen creer, que este tipo de problemas no va con nosotros, que la calidad de la democracia es un tema solo de culturetas, mientras no se dan cuenta que la mierda empieza a llegarnos al cuello. Sigamos sin alzar la voz, aun viendo como la corrupción inunda cada rincón de este país. Nadie se atreverá a lanzar la primera piedra, convencidos por las televisiones de que España va bien, que ya hemos salido de la crisis, que baja el paro y se crea empleo de calidad. Nadie exige responsabilidades, si no es él, quien está en la lista de espera para operarse, o al que le suben los impuestos. Entre egoísmo y cinismo.


Viene a colación, un poema que se atribuye a Beltorld Brecht, pero cuya autor fue Martín Niemöller, titulado “Ellos vinieron”. "...Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante. Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie que dijera nada".  Nadie dice nada, y mucho menos en agosto, cuando gobierno y oposición están de vacaciones, que es lo que ahora toca.

CAMBIO DE FASE

Se acabo la fase uno con Feijoo. Entramos en la siguiente fase, esperemos que, con Sánchez, porque el monarca es competente para darnos sorp...