jueves, 29 de enero de 2015

SOCIALISTAS Y PROPIEDAD PÚBLICA


El PP ha convertido a Podemos en el objetivo de sus dardos, convirtiéndose así en su mayor empresa de propaganda, lo que lamento es que algunos compañeros socialistas parecen no ser conscientes de ello, y siguen empeñados en entrar en ese juego. Un socialista habla de Pablo Iglesias con mayúsculas, no de Pablo Iglesias.

Los ciudadanos rechazan la política, porque rechazan a los políticos, y la causa de ello son  exclusivamente los políticos. Los partidos se perciben como si todos sus cargos públicos fuesen políticos profesionales, que en la política tienen un salario, y que están más pendientes de su propio bienestar, que del de los demás. Pero no todos los políticos son iguales, porque no es igual estar en la cúpula de un partido, que ejercer la política en un pequeño Ayuntamiento, o sencillamente desde las bases. En las bases se defienden unos principios, pero es cierto, que llegar a la cúpula de un partido requiere, además de esos principios, una dosis de ambición personal, que solo unos pocos poseen. Pero es esa minoría que está en las cúpulas la que representa la imagen del conjunto de la militancia, y ahí puede estar el origen del rechazo al colectivo.

La estructura de los partidos se adapta a los fines que cada uno persigue, pero en cualquier estructura, la cúpula no  puede tratar a las bases como si fuesen fervorosos creyentes de un dogma, obligados a acudir a sus homilías los domingos y fiestas de guardar. Las bases de un partido no son feligreses sino portadores de opinión. Si un partido no escucha a la calle, son sus dirigentes los que no escuchan a la calle, porque sus militantes son parte de esa calle.

Para los socialistas sólo hay un PSOE, y está dirigido por quien los militantes han decidido. Las alternativas, los críticos y disidentes internos son imprescindibles, y si faltan esos, llega el inmovilismo y la muerte de la organización. Si existen cuestiones internas es porque no han sido solucionadas, y eso se debe a que ha faltado voluntad para hacerlo. La disidencia debe aplazarse entre congresos, pero eso no puede significar su silencio y el total asentimiento a los dirigentes. Un solo PSOE con diversidad en las formas de entender la política en su interior, ligadas por los valores de libertad, equidad, justicia social y solidaridad, y deben defenderse esos valores hacia fuera, pero también ser defendidos hacia dentro de la organización.

Si todo lo anterior es compartido por los socialistas, no se comprende que hoy hablemos más de personas que de nuevas ideas. Ese PSOE se parece poco al que creo Pablo Iglesias, más preocupado por hablar de soluciones que de los problemas que las necesitaban, de los ciudadanos que del Estado o las Regiones. Ese es el socialismo que acerca la política y los políticos a sus ciudadanos.

Para recuperar la identidad socialista, se puede empezar por dar respuestas sobre cuáles serán los yacimientos de empleo en los que un gobierno socialista prevé crear los puestos de trabajo que este país necesita. Como les garantizaremos a los trabajadores un salario digno y a los mayores una pensión digna. Que haremos para que la igualdad de hombres y mujeres sea real, y no solo una declaración. Como restauraremos la sanidad y educación públicas, los servicios sociales y la atención a los dependientes. Como mejoraremos la vida de los agricultores y los ciudadanos rurales, y a la vez protegeremos el medio ambiente e impulsaremos las energías renovables. Eso es lo que la gente espera de un partido que quiere gobernar, no que acuse a los demás partidos de carecer de programa.

Pero para muchos socialista, parece que nuestro partido no está en eso. En la cúpula parecen estar desconcertados ante el boom de Podemos, pero lo que realmente es preocupante, es el desconcierto de las bases sobre nuestra identidad como partido, y el desconcierto que transmiten algunos dirigentes ante los problemas de los ciudadanos. Mientras se requiera tiempo para solventar cuestiones internas en lugar de dedicarlo a atender las demandas de los ciudadanos, seguirá aumentando su cansancio y su desafecto hacia quienes se dedican al noble oficio de la política. Los ciudadanos queremos que los partidos se dediquen más a la política y menos a sus políticos.

Tomas Jefferson dijo, que cuando alguien asume un cargo público, debe considerarse a sí mismo como propiedad pública. Y algunos parecen haber olvidado algo tan elemental como eso.

miércoles, 28 de enero de 2015

GRECIA NO ES ESPAÑA, PERO SE LE PARECE

Las elecciones griegas nos anuncian el maratón electoral que mantendremos los españoles este 2015. No somos Grecia, pero como mediterráneos tampoco somos tan diferentes de ellos, y seguro que alguna repercusión tendrá su resultado sobre nosotros. Por eso no está de más, un análisis de esos resultados, por si pueden enseñarnos algo. El titular es, un gran triunfo de la izquierda encabezada por Syriza, pero permite más lecturas según las diferentes formaciones de esa izquierda.

Derrota real de la derecha de Nueva Democracia (el partido que provocó la intervención del país por manipular durante años el déficit griego), pero mantiene el porcentaje de voto, y ha podido salvar los muebles. Y no era fácil, porque sus políticas de austeridad, similares a las del PP aquí, solo han llevado a la devastación del país. Pero son la derecha, y allí como aquí, el voto de la derecha siempre acaba en su lado, y más si llaman a arrebato con la sempiterna excusa de que viene el lobo.

En la izquierda, los votos suman lo mismo que hace tres años, pero repartidos de manera diferente. El hundimiento del Pasok (un partido calificado de izquierda, pero que nunca fue tal) le ha llevado al séptimo lugar de voto, pero la suma de los votos de Syriza, KKE y Pasok es prácticamente la misma que entonces. Alarmante resulta, que mantiene casi un siete por ciento de apoyos la extrema derecha en el formato  Amanecer Dorado, pese a la dimisión de su líder y a que sus propuestas son más propias del nazismo de finales de los años cuarenta, que de una democracia del siglo XXI. A esto hemos de añadir la aparición de un nuevo partido, To Potami, y la pérdida de apoyo de las formaciones independientes respecto a hace tres años.


De las repercusiones de esos resultados en nuestro panorama electoral, pueden hacerse diferentes interpretaciones, y esta es solo una más. De una parte, la victoria de Syriza puede ser muy positiva para Podemos o puede convertirse en un boomerang mortal. Una u otra consecuencia está condicionada a que Syriza pueda de inicio cumplir su programa en Grecia, eso supondrá un respaldo a las tesis del partido de Iglesias, pero si fracasa, en unos meses se llevará por delante mucha expectativa de voto de la formación española.

Por mucho que figuren en su programa, y en sus manifestaciones públicas, Syriza podrá acometer ya, solo las reformas que dependan del gobierno griego, pero para las que dependan de Europa no se lo van a poner fácil. Basta mirar como la segunda economía europea, Francia, se opuso a la austeridad desde la llegada de Hollande y  no ha podido acabar con ella. Exigir a Syriza que logre cambios en unos meses, puede ser hasta injusto, pero sabemos que en la UE prima la economía sobre la justicia.

Muchos apuntan que en el PSOE hay pánico por la posibilidad de acabar como el PasoK, quienes lo afirman saben que eso es algo improbable hoy, porque el verdadero pánico está en el PP ante la posibilidad de que eso ocurra, y sea Podemos el que ocupe su lugar. Ese pánico lo dejo ver Rajoy en la entrevista televisiva post elecciones griegas, porque él está convencido, de que el PP perderá mucha representación, pero aguantará como ha hecho Nueva Democracia, pero, eso sí, solo si el electorado del PSOE sigue firme y fiel. Sin embargo parece que olvida que hay un nuevo elemento emergente entre el electorado de derechas, representado por Ciudadanos, cuyo auge restará apoyos al PP, hoy muy desgastado por sus políticas, y puede dar al traste con esos cálculos.

El resultado de Nueva Democracia es todo un aviso para los navegantes españoles, porque pese a los recortes del PP, al incumplimiento del programa electoral, y a que el partido se percibe como un odre rebosante de corrupción, el votante de la derecha acudirá fiel a dar su apoyo a cualquier candidato aunque este imputado, bajo el lema “es un chorizo, pero es mi chorizo”. La extrema derecha española, es lógico que apoye como siempre al PP, pese a que la ambigüedad de Podemos (ni de izquierda ni de derecha), que aún le permite disimular quien tendrá su apoyo hasta el último momento, y acabaran apoyando lo que antes pueda acabar con la democracia.

Entre la izquierda existirá un trasiego de votos similar al de Grecia, pero seguro que no de una forma tan estrepitosa. Son muchas las variables a tener en cuenta: la falta de concreción del programa de Podemos, unida a que su líder puede aparecer como un magnifico contertulio televisivo, pero cada vez se muestra más prepotente, y aún no transmite sensación de ser un estadista como si lo ha hecho Tsipras; que las disputas en el PSOE le restan credibilidad a Sanchez; y que Izquierda Unida, pese a la buena imagen de Garzón, está desaparecida en combate engullida por Podemos. Todo junto nos hace intuir, que aunque el trasiego de voto en la izquierda se dé, es pronto para decir hacia dónde, y en que volumen.

Con este panorama, si su objetivo es desalojar al PP de la Moncloa, (lo que su forma de actuar en ocasiones puede ponerse en duda) la izquierda española debería dejar de atacarse, y buscar puntos de encuentro para un programa de mínimos en común, en lugar de ahondar en sus diferencias. Cuanta más leña se den entre las formaciones izquierdistas, mejor para el PP. Dicen que mientras entre los partidos de la derecha, existen diferencias pero les une un objetivo común, entre las formaciones de izquierdas tienen un objetivo común, y les separan las diferencias.

Por eso, puede que el manido eslogan de que PP y PSOE son iguales, si Syriza no consigue realizar pronto lo que ha prometido, acabe pasando factura a sus impulsores de Podemos. Entonces empezaremos a escuchar, que Grecia no es España, y que entre Podemos y Syriza hay muchas diferencias, pero será por boca de Podemos, curiosamente, lo mismo que ahora están diciendo desde el PSOE respecto a Grecia y el Pasok.

Mientras la izquierda siga así, lo único seguro, es que en Génova 13 seguirán frotándose las manos. Puede que los dirigentes de la izquierda deban aprender a llevar el zapato derecho en el pie izquierdo sin que les salgan callos, lo que según Guy Mollet, es todo un arte, y al parecer difícil para los hoy cabezas de cartel.


jueves, 22 de enero de 2015

A VECES HAY QUE NO DESPEGAR LOS LABIOS



Anoche se supo de una reunión a espaldas del actual líder socialista. Esta mañana en Ferraz las aguas del rio discurren más turbulentas que de costumbre. La muestra de ello, en la intervención de Luz Rodriguez sobre la reunión mantenida por Zapatero, Bono, Iglesias y Errejón. Ha sido absolutamente clara, lo que en estos tiempos es de agradecer, aunque para algunos sea un error: "No entiendo a santo de qué se reúne el expresidente del Gobierno socialista con los dirigentes de Podemos". Para finalizar, calificaba esa reunión de inadecuada, inoportuna y de ser un sin sentido político.

Fue a finales del pasado año en casa de José Bono. Iglesias lo justifica con el dato de que Bono defendió a su padre, y de ahí viene su relación. Zapatero tenía interés por conocer a Iglesias, y este a Zapatero. Iglesias dice que no se puede concluir que en esa reunión se hablase de pactos o e estrategias, y que es normal conversar. Hasta ahí todo lo dicho por las partes resulta creíble. El matiz es, que mientras que Iglesias si informó a su Ejecutiva, e incluso se hizo acompañar por Errejón, Zapatero y Bono no informaron a Ferraz.

La guinda la pone Iglesias afirmando que la reunión no se hizo pública a petición de los socialistas, porque consideraban que podría "afectar a su partido". Quien está aprovechando el encuentro es Podemos que se permite meterle el dedo en el ojo a Pedro Sanchez al decir que “La altura de miras de Zapatero y Pepe Bono de hablar y dialogar, independientemente de las diferencias políticas, es algo de lo que deberían tomar nota en el partido socialista, que parece que solo nos insultan".

Parece que la  moda impuesta por el PP llamando a las cosas con nombre diferente, también ha llegado a los demás partidos, y a un encuentro entre miembros de dos organizaciones políticas, que compiten por un mismo espacio electoral, se le denomina “relaciones personales”. Puede ser así, si una de las partes no representa a nadie, y eso es lo que aquí ocurre.

La evolución política de Podemos en algunos aspectos, recuerda a la marcha tabetica, y empieza a ser cada día más curiosa: odian a la “casta” pero se reúnen con ilustres miembros de esa casta; critican a los que ven “Sálvame” y pasan por la fiesta de Carmen Lomana; dicen que PSOE es lo mismo que el PP y se reúnen con unos socialistas malos malísimos que como todos los socialistas están en política para lucrarse; Zapatero traiciono a los españoles reformando la Constitución y ahora resulta que es una persona honesta. Espero que no acaben diciéndonos que Rajoy es un gran estadista, que Aznar la madre Teresa de Calcuta, o algo similar.

En Ferraz se equivocan si se ponen nerviosos por ese encuentro, porque le dan más importancia de la que realmente tiene, si el Secretario General sabe dónde dirige la nave socialista. Pocos ciudadanos ven en la figura de Zapatero a la izquierda, y eso que los mayores avances sociales se produjeron durante su gobierno. Incluso algunas voces  le dirán que debería estar encantado de que no esté a su lado. Y de Bono, ¿qué decir? Siempre fue el novio en la boda, el niño en el bautizo…Parece necesitar que hablen de él, aunque sea mal. La reunión no tenía mala intención, pero huele a metedura de pata de lo más inoportuna.

Mientras Sanchez parecía reforzar la critica a Podemos poniéndose en la línea de los Marhuenda o Inda, lo que hacía sospechar que la estrategia era cerrar la sangría de votos al partido de Iglesias, se encuentra con la desagradable sorpresa de que le levantan más los pies desde dentro que desde fuera. Hasta a quienes no hemos apoyado al actual Secretario General, vemos en la reunión  una puñalada por la espalda, al no saberlo Pedro Sanchez. Solo le falta a Ferraz que algunos salgan diciendo que la salvación del partido está en Andalucía, para que tiemblen los cimientos.

Aunque faltan meses para las municipales, han dado comienzo los juegos florales por todas las esquinas. Parece que algunos juegan a la guerra de guerrillas, con el objetivo es  desacreditar al adversario sea quien sea. Al menos la secretaria socialista de empleo, tiene claro quién es su secretario general, lo que no parece estar tan claro en  todos los partidos, o que le pregunten a Mariano sobre Esperancita.

Creo que fue Lincoln el que dijo que hay momentos en la vida de todo político, en que lo mejor que puede hacer es no despegar los labios, y este puede ser uno de ellos para Pedro Sanchez. Porque la suerte que va a tener es que la gente está hasta el gorro de llevar en campaña electoral desde tiempo inmemorial, y estos bombardeos ya no funcionan en la calle, y cada vez más, los ciudadanos acabamos apoyando al herido antes que al que disparó la bala.

Me pregunto, si ¿puede resultar tan difícil centrarse en hacer un programa creíble y tener la suficiente decisión política para llevarlo a cabo?. Es que tanto ruido empieza a molestar en los oídos, y cuando eso ocurre hasta la más hermosa sinfonía, te cansa.




miércoles, 21 de enero de 2015

PRISIÓN PERMANENTE REVISABLE


En solitario en el Congreso, el PP ha aprobado su reforma del Código Penal. Con esa aprobación, hace caso omiso al manifiesto elaborado por más de sesenta catedráticos de derecho que se oponían a los contenidos de esta reforma, al  entender ellos, que atenta contra la dignidad humana. Pero poco importa la dignidad humana a Rajoy y los suyos en año electoral, si con esta maniobra pueden asegurarse un buen puñado de votos.

La gran novedad es la figura de la “prisión permanente revisable”, forma descafeinada de llamar a la cadena perpetua. El texto considera los supuestos en que será aplicable, denominándolos “casos de excepcional gravedad”. Tales serían los asesinatos especialmente graves, homicidio de  jefes de Estado, genocidio y crímenes de lesa humanidad. En estos casos, la pena puede ser revisable a los 25 o 35 años, pero lo verdaderamente perseguido con la reforma, es que sea posible el internamiento de por vida.

Nadie puede garantizar la imparcialidad de esa revisión, siempre a expensas del momento político y social en que se realice. Basta con ver, como con los recientes asesinatos yihadistas en París, o el 11 M y ETA en nuestra memoria, para entender que esta medida puede parecer adecuada y contar con un amplio apoyo ciudadano hoy, que seguro no tendría en otras circunstancias. Esta cadena perpetua ligth es una vieja aspiración del PP, que ya en la última reforma del Código Penal se abstuvo, precisamente porque este planteamiento no se contemplaba.

Sus promotores están pensando en que les reporte réditos electorales. Tanto acusar de demagogia o populismo a todos los planteamientos de la oposición, cualquiera que fuese el contenido de sus propuestas, cuando el PP sabe que no hay nada tan “populista” como endurecer las penas de cárcel en año electoral, con la sangre aún caliente. Cualquier país serio, antes de darse nuevas leyes, haría bien en cumplir y hacer cumplir las que ya tiene, de lo que el nuestro no es precisamente el mejor ejemplo.

Una ley de esta importancia se debe intentar que sea fruto de un consenso, y no una imposición del gobierno de turno. En tres años de legislatura del PP, casi todo lo importante lo ha hecho en solitario, lo que demuestra que con ellos el consenso solo se puede alcanzar, si se acepta hacer lo que ellos quieren hacer. Gobernar con encuestas de opinión de cada momento, es la mayor forma de desgobierno, y una muestra clara de absolutismo populista.

Si la Constitución del 78 (esa que el PP no quiere modificar) dice que el objetivo de nuestro sistema penal es reeducar para la reinserción social, podría ocurrir que el Tribunal Constitucional tenga que pronunciarse, porque seguro que alguien recurrirá la reforma, y de ser declarada inconstitucional, las sentencias en las que se condenase a esta pena ahora aprobada, podrían ser declaradas nulas y poner a esa gente en la calle. Precisamente lo contrario que con la reforma se persigue, una gran paradoja.

Cualquiera conoce, o hasta ha sido víctima indirecta de ellos, delitos que a primera vista son merecedores de castigos ejemplares. Incluso son conocidos los casos de gente que condenados y cumplida la pena, han salido para volver a delinquir, y vemos que en esos casos existe una verdadera incapacidad de reinserción. Pero esos casos son minoría, y no se puede legislar para una minoría ni sobre casos concretos, porque un Estado de derecho debe legislar para todos fijando sus normas, pero no haciéndolo sobre lo excepcional. Una democracia siempre tiene alternativas, sino no es democracia, y la prisión permanente revisable no es imprescindible.

Si ejercer la oposición es el arte de prometer aquello que el gobierno no puede asegurar, el PP se está haciendo oposición a sí mismo porque no puede garantizar que esa reforma se aplique. El PP está tan pendiente de lanzar sus mensajes electoralistas en los medios, que se olvida de que puede tener los días contados en el ejecutivo, y  reformas no consensuadas pueden ser papel mojado en noviembre. Esperemos el dictamen del Senado pero me temo que no cambiará nada, y que tras las elecciones estaremos en un “vuelta a empezar” para los cansados y sufridos españoles.

En todo caso, este gobierno en sus tres años, resulta casi tragicómico. Si a la “emigración de jóvenes” la denominó “movilidad exterior”, y ahora a lo que es “la cadena perpetua” ha decidido bautizarla como "prisión permanente revisable", cualquier día puede llamar a la “pena de muerte” algo así como “viaje intergaláctico sin retorno”. Produce risa, pero es para llorar.


lunes, 19 de enero de 2015

EL CANTO DE LAS CIGARRAS


Dicen que rectificar es de sabios, y como Cospedal ya ha rectificado su declaración de bienes y patrimonio en tres ocasiones, debe estar a punto de obtener el título de sabionda mayor. La primera fue por no declarar unas indemnizaciones del Senado, luego por no incluir en la declaración un local en Albacete, y la tercera por no declarar una indemnización como diputada regional.

Pero al parecer, tres no son suficientes para el título, y  necesitaba una cuarta. Por eso en la declaración patrimonial de 2014, declara la mitad de la casa en que vive, pero no la parcela donde está ubicada la casa, terreno de más de 12.000 metros cuadrados. Y además, lo que declara como construido no se corresponde con lo que figura en el Registro de la Propiedad y en el Catastro. Aparte de lo declarado o no, se observa que vive con la misma austeridad que nos pide a los castellano-manchegos.

A ella le vale con rectificar. Pero si un responsable político oculta su patrimonio, debería ser investigado como cualquier hijo de vecino, y no limitarse a rectificar y santas pascuas. El problema de esta señora es que,  es la cuarta vez que se equivoca en su declaración de bienes. Una, puede pasar, todos nos equivocamos, pero cuatro no. Si es abogada del Estado, debe conocer la ley y sus obligaciones, y si las ha incumplido lo ha hecho con premeditación y alevosía, y presuntamente hasta prevarica. La honestidad no puede estar reñida con el cargo.

No hace tanto tiempo, ella defendía la  honradez de todo su partido y decía sentirse insultada cuando se ponía en duda su moralidad. Sin embargo ahora, no pasa un solo día en el que no se conozcan nuevos casos de corrupción en el corazón del partido que se autodenomina impulsor  de la transparencia. Lo cierto es que parece que creen tener patente de corso, como si no entendiesen que las leyes también les afectan a ellos, Particularmente lo de Cospedal es lo más nauseabundo, al permitirse dar lecciones de moralidad, cuando siempre se le pilla en renuncios.

Porque no me dirán que no es llamativo que Cospedal, aun estando casada con una persona, fiscalmente parece que con quien comparte mesa y cama es con una empresa. No debe considerarse evasión de impuestos, que una empresa compre media casa para disfrute personal. Parece que lo normal sería que el salario llegue a una persona, y luego esa persona se compre una casa. Aquí no, compra la casa la empresa del marido, la mitad se la regala a Cospedal, y la otra mitad sigue siendo de la empresa. Por lo tanto deberíamos entender que el objeto social de esa empresa es el recreo de familia y amigos, y por lo tanto, el personal de servicio, la limpieza, la jardinería, el mantenimiento de la piscina, o las obras de adecuación, figuraran como gasto corriente de la empresa, aunque tal vez se imputen como I+D+I.

Para llorar la defensa del caso por parte del PP regional. Parece que los terrenos se clasifican en urbanos, urbanizables, rústicos y sin valor. El de su presidenta es de los sin valor, y eso que no es precisamente pequeñito, sino tamaño campo de futbol. Se trata de un asunto privado, de responsabilidad fiscal de una persona física, pero la defiende todo el partido, y eso que en sus estatutos no se habla de la defensa de “un terreno sin valor”, pero con el PP todo es posible para justificar lo injustificable.


Tristemente para esta región, con el PP la corrupción no parece lo extraño, sino la norma. Si hubiera que poner un ejemplo de cinismo, sin duda yo escogería la figura de la señora de la peineta y mantilla yendo a confesarse. Esa que cada día demuestra que una cosa es predicar y otra dar trigo. La defenderan los medios de comunicación afines, pero decía Malcon X que si no se está prevenido contra los medios de comunicación, te harán amar al opresor y odiar al oprimido. Habrá que estar ojo avizor ante el canto de las cigarras del cigarral.

domingo, 18 de enero de 2015

DE OVEJAS Y DE LOBOS

Tan ocupado andaba Rajoy salvando al mundo, que no se dio cuenta que los sinvergüenzas estaban en su casa. Van años de noticias relacionadas con el caso Gürtel, y cada vez es mayor la sensación de que solo conocemos una mínima parte de todo lo que se cocía en esos quince años de financiación oscura. Pese a que las ilegalidades son palmarias, el PP sigue obstinado en ocultar, negar todo, y gobernar como si nada pasara, aunque ahora les acusan y les reclaman más de trescientos mil euros en concepto de responsabilidad civil como partícipe en la trama.

De vergüenza un país, en el que mientras la gente se quedaba sin trabajo y sin sus casas, y la secretaria general del PP nos daba lecciones de moralidad, su partido se financiaba ilegalmente con contrapartidas por a otorgar contratos públicos a sus benefactores. Enriquecían a unos pocos de amigos, a costa de encarecer la obra pública. Una lista interminable de obras desde los gobiernos de Aznar, hasta llegar a los Bárcenas, Correa y el Bigotes, pero con muchos más cargos del partido formando parte de la santa compaña.

Parece que quienes junto al PP veían una oportunidad reciproca de negocio, la estrategia era fácil. Se sacaban el carnet del partido, se vestían bien, iban a misa los domingos y fiestas de guardar, y a partir de ese momento, recibir las influencias de los compañeros de militancia dejaba de ser algo casual para convertirse en cotidiano. Toda una legión de “pequeños nicolases”, pero menos mediáticos.

Aunque en el PP ya tenían sus cabezas de turco, y en Génova  aparentan tranquilidad, desde el pasado viernes hay acusación formal de la fiscalía. Esta habla textualmente de "Financiación ilegal del PP" y  de “aprovechando al efecto de la evidente opacidad que ofrecía la doble estructura creada por el PP". Califica al PP de fraudulento por financiación ilegal y afirma que existe  una trama del PP, y no una trama contra el PP.

Según el escrito de acusación, parece que no les ha servido de nada que se hayan destruido los discos duros y las agendas e visitas a la sede, ni negar que existiera una contabilidad B del partido. Por respeto a la presunción de inocencia, diré que estamos ante presunto fraude electoral, ante un presunto atentado democrático, y ante presunta delincuencia política.

Durante la instrucción, han surgido cientos de preguntas que aún no tienen respuesta: ¿Se investigará a los empresarios que pagaban comisiones?; ¿En casi veinte años nadie de la cúpula del partido se dio cuenta?; ¿De quién recibía órdenes Bárcenas si solo era el tesorero? ¿Cuántos años le pide la fiscalía al PP? ¿El dinero público de las comisiones que le piden, lo va a devolver ya como la Infanta? ¿Alguien se cree, que un partido que ha gobernado no realice auditorías internas para revisar su contabilidad? Tras la acusación, surge una ¿Debe dimitir alguien de inmediato?

Ni las contestan en el PP ni en Moncloa, porque según ellos este asunto afecta exclusivamente a Bárcenas. Parecen olvidar las frases que hemos escuchado, sobre todo a Rajoy, en los años de instrucción del caso: "Son fotocopias de fotocopias" refiriéndose a los papeles de Bárcenas; "Nunca se podrá probar que estas personas no son inocentes"; "Luis, aguanta, sé fuerte, nada es fácil" "Yo no tapo nada, pero tampoco levanto alfombras, Si hay que limpiar, que lo haga la justicia" o la ya citada de Rajoy con la plana mayor del PP "No es una trama del PP, es una trama contra el PP".

Pese a todo lo reflejado por la fiscalía en la Gurtel, el PP se obstina en presentarse como un mártir de la inquisición periodística. Debe ser que no son responsables en la Gürtel, y tampoco del listado de asuntos turbios que les afecta directamente: Bankia, el AVE de Guadalajara, las preferentes, el aumento de los desahucios, las hipotecas basura, o el basurero que tiene instalado en la Comunidad Valenciana hasta con Papa y coches de carrera de por medio.

Ya solo les falta negar, que ellos tampoco fueran los que afirmaron que había armas de destrucción masiva en Iraq. La justificación de todo la encuentran en que es parte siempre de la herencia recibida de Zapatero, y curiosamente nada es herencia de Aznar que era el presidente del PP en los años de los hechos que ahora se tipifican, y que en la boda de su hija contó con todos los implicados en la trama como invitados, es de suponer que porque alguna relación tendría con ellos.

Ahora que el informe de la Fiscalía acredita la falta absoluta de transparencia y de honestidad del presidente del PP y del gobierno, no se puede entender que el Secretario General del PSOE se limite a decirle a Rajoy que asuma su responsabilidad. A él se le podría cuestionar también el ejercicio de su responsabilidad preguntándole ¿Para cuándo la presentación de una moción de censura del PSOE? ¿Por qué no pide su dimisión como presidente del gobierno? Muchos ciudadanos no entienden su actitud, quizás porque no ha dado las razones de porque actua así.

El PP cree fácil responder a las acusaciones, con que el PSOE tiene que callarse por FILESA, o por los ERE´s, o IU por la situación de dudas sobre Tania Sanchez, o CIU con el caso Palau o el Pujol. Seguro que a cada formación le encontraran su sambenito. Pero la corrupción del PP no puede justificarse con la de los demás, porque la acusación de la fiscalía se ha formulado contra el PP, y es su honestidad la que se pone en entredicho, y no la de los demás partidos. El “y tú más”, es defender lo indefendible.

La Gurtel es ya un escándalo de tal dimensión, que en cualquier país del mundo sería suficiente para desautorizar a un partido por corrupto, y forzar la dimisión del gobierno de ese partido. Aquí parece que no será así. Que no haya dimisiones es una falta de respeto a los ciudadanos, pero sobre todo hacia quienes han votado al PP. Su estrategia es esperar a que pasen las elecciones para luego pasar la aspiradora, aunque algunos de sus responsables piensan que para entonces el partido estará dividido, y si hay problemas, será responsabilidad de la actual dirección.

Hoy ya nadie entiende que Rajoy no dé explicaciones, ni resulta creíble que lleve años en el PP ejerciendo cargos de responsabilidad (secretario general, y ahora de presidente del partido) y no se enterase de nada. Mucho menos, que en el país continuemos como si nada hubiese ocurrido, sin que actúen los partidos de la oposición, y sin que lo haga el poder judicial. De continuar así, nadie creerá en la imparcialidad del Supremo, ni la del Constitucional, ni en la justicia española en su conjunto. Pero mucho menos en el sistema político que tenemos.

Aviso para navegantes en las próximas elecciones, aunque ya dijo Edward R. Murrow, periodista estadounidense de principios de siglo pasado , que “Una nación de ovejas, engendra un gobierno de lobos”. Parece que llevaba razón.

viernes, 16 de enero de 2015

CONOCER PARA TENER OPINIÓN. EL YIHADISMO



Conocer de primera mano que es el yihadismo internacional, sus causas, sus consecuencias y los métodos de reclutamiento de jóvenes que utiliza, bien merece dedicarle una tarde, después de los acontecimientos de París, continuidad de los de Madrid, Londres y Bélgica. La V Semana Laica de Albacete ofreció esa oportunidad.

La introducción al tema, en base a datos actuales, por el profesor Fernando Cuartero. La conferencia por el profesor de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad Autónoma de Madrid, Waleed Saleh. Una fuente de información y de su historia, huyendo de ser una versión propia del ponente, pese a narrarla un perseguido por la dictadura de Sadam Hussein, en su Iraq natal.

El yihadismo tiene su origen en las corrientes que a lo largo de la historia han tratado de unir la religión del Islam y la política regional de Oriente Medio. Un ejemplo de esa fusión político-religiosa, y el más conocido en occidente, es el movimiento de los Hermanos Musulmanes en Egipto. A lo largo de la historia, por diferentes hechos, en este movimiento se han ido dividiendo diferentes grupos, unos más extremistas que otros.

Todos los movimientos con vinculación al yihadismo, tienen varias etapas en su desarrollo, que van desde  su nacimiento,  hasta su expansión, pasando por la profundización de sus creencias. Pero no solo estos movimientos se han dado en Egipto, sino que se producen también en Arabia Saudí y en Irán. En este último país, además han contado con el apoyo del gobierno, y los religiosos han sido apoyados por la guardia revolucionaria iraní, lo que les ha permitido crecer y conseguir exportar su revolución.

Existe un objetivo común de todos estos grupos, que es la instauración del estado islámico y del califato musulmán. Su ideología está inspirada en la idea de que la patria no es un territorio geográfico, sino el propio Islam, que a su vez  es también su constitución, y para sus fieles la solución de todos los países y sociedades. Para estos grupos, Dios es quien legisla y quien gobierna.

Su estrategia consiste en avanzar partiendo de que su ideología acepta la pluralidad política, pero sin embargo, admiten que cuando lleguen al poder político dejaran de aceptarla y la rechazaran. Para ello utilizan un doble método de avance: uno pacífico (como es la predicación para conseguir un cambio paulatino de la sociedad), y otro violento (derrocando a las autoridades políticas para así conseguir el cambio de la sociedad). Pero en cualquier caso, no hay diferencias entre unos grupos y otros, porque persiguen el mismo proyecto político.

El islam político no reconoce la democracia, solo la Sharia o Ley Islámica, que para ellos representa la forma islámica de la democracia. Llaman al sometimiento y no a la liberación.

El movimiento actual denominado Estado Islámico (EI), surge tras la invasión de Irak, y como consecuencia de la destrucción del ejército iraquí, lo que permitió la entrada de muchos grupos a ese país desde otros países. Esos grupos se organizan en grupos armados y atacan a las autoridades y a los civiles musulmanes. Hoy se extiende por Irak y Siria, pero ejercen como contrapeso al poder que ejerce Irán en la zona al contar este país con el apoyo norteamericano. El EI es el reflejo de una lucha por el poder en la zona entre Arabia Saudí e Irán. El EI no odia solo lo occidental, sino a todo aquel que no comparta con ellos esta forma de interpretar la religión.

Pese a lo que muchos afirma, no hay un fracaso de la integración de la emigración musulmana en Europa, y si de algunos grupos de esa emigración. Los métodos de reclutamiento, fundamentalmente a través de las redes sociales, se ven favorecidos por la pobreza y la miseria social en la que viven muchos de esos jóvenes  en algunos países europeos. También las cárceles son un lugar de reclutamiento.

El papel de la mujer en los grupos que tienen esta forma de interpretar la religión islámica, es absolutamente secundario, solo se la considera un objeto.
El desconocimiento de estos movimientos en Occidente, se ve agravado porque en centro Europa se hace una mala utilización del lenguaje y de lo que significa para la cultura europea y su significado entre los musulmanes. Ejemplos de esa confusión, son como confundimos fundamentalismo, o  radicalismo, con posiciones extremistas, cuando  significan ir a lo fundamental, o buscar la raíz de algo.

De todo lo expuesto, algunas conclusiones. Primera, que la ausencia del libre pensamiento y del laicismo, y la mezcla de religión y poder político, está detrás de lo que hoy es el caldo de cultivo de la actitudes intolerantes. Segunda, que la postura e intervenciones de muchos gobiernos occidentales está sirviendo para fomentar posiciones extremistas. La conclusión final, es que yihadismo es una forma minoritaria de entender el significado del Islam, pero no es el Islam.


jueves, 15 de enero de 2015

¿Dejar morir a los pueblos pequeños para que crezcan los grandes?


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Los datos de población regional, a enero de 2014, han sido objeto de diversas declaraciones de políticos regionales de uno y otro signo. Todos dicen sentirse preocupados por la pérdida de ciudadanos de nuestros pueblos y en particular de los pequeños municipios.Todos dicen conocer las causas: inmigrantes que regresan a sus países de origen, falta de recursos para abordar el problema, o, la más habitual ahora, de la culpa no es mía sino de la herencia recibida.
Poco hacen unos y otros, porque ambos están convencidos de que es un problema sin solución posible. Se equivocan.
La provincia de Albacete lleva dos años sin crecimiento poblacional, aunque si lo hace su capital y las localidades más grandes. De los casi cuatrocientos mil habitantes provinciales,más del setenta por ciento residen en la capital y las cinco localidades más pobladasde la provincia. El contraste a esta concentración, lo encontramos en las Sierras de Alcaraz y Segura, y algunos municipios de La Mancha y La Manchuela, que sufren un despoblamiento progresivo desde hace décadas.
Como en las demás provincias, en la nuestra tenemos un éxodo de población desde los pueblos hacia la capital, y en paralelo, esta migración está produciendo una masculinización de la población rural. Revertir esa tendencia resulta cada vez más difícil, pero si quiere hacerse deben modificarse todas sus causas, que contrariamente a lo que suele expresarse, no es en exclusiva la falta de empleo, aunque esta sea la más importante.
La primera causa es el empleo, aunque visto en un sentido más amplio, deberíamos decir que la causa es la falta de un mercado laboral próximo a los territorios rurales, que permita tener perspectivas optimistas de futuro. No se despueblan las localidades próximas a esos mercados de trabajo, sino las alejadas de ellos. Se realizan pronunciamientos y propuestas de políticas contra el despoblamiento, pero sino parten de un análisis de las posibilidades reales de ese mercado laboral, fracasarán, al ser imposible dimensionar el número óptimo de pobladores que pueden permanecer asentados en ese territorio.
Tan importante como el empleo, el segundo factor imprescindible es la vivienda. Nuestros pueblos presentan unos cascos antiguos deshabitados y en muchos casos en estado de semiabandono. La política de vivienda rural se ha basado en la urbanización de nuevas zonas en lugar de en la rehabilitación de los inmuebles céntricos de la localidad, y de su salida al mercado de alquiler. Es imprescindible acometer la movilización del mercado de la vivienda rural, y en eso mucho tienen que decir los Ayuntamientos.
El tercer factor es la existencia de servicios de proximidad, desde los públicos a los de iniciativa privada, pero si los servicios no son próximos al lugar de residencia, difícilmente los residentes permanecerán allí. El impulso de estos por las administraciones va a condicionar el éxito de cualquier proyecto de fijar población, y desde luego la supresión de aulas escolares o de centros de atención de urgencias rurales, o disminuir los servicios de ayuda a domicilio, como se ha planteado en nuestra región, es incompatible con la lucha contra el despoblamiento rural.
Por último, las infraestructuras tales como buenas comunicaciones por carretera, disponer de nuevas tecnologías, tener calidad en el suministro eléctrico, cobertura de telefonía móvil, o existencia de  transporte público interurbano, son condicionantes que o se aborda garantizarlas con urgencia, o será imposible mantener población. Aquí resulta imprescindible la actuación pública, porque si estos aspectos se dejan exclusivamente en manos del mercado, la falta de rentabilidad económica de esos servicios, hará que nunca se garanticen para el medio rural.
En todo lo anterior, no solo es clave la intervención de las administraciones públicas, sin las que luchar contra el despoblamiento de nuestros pueblos es imposible. Sino que además su actuación es indispensable que contemple unas premisas básicas: no pueden ser actuaciones improvisadas; es necesario invertir recursos económicos; han de aplicarse políticas de género; y por último, que sean proyectos de política rural integral capaz de a problemas concretos dar respuestas concretas, y en ningún caso plantearla como una suma de políticas sectoriales.
Si a nuestros dirigentes les preocupa tanto como dicen el despoblamiento rural, deberían tener claro que si no se cambian las condiciones que fueron causa del despoblamiento iniciado en los años cincuentaseguirán siéndolo esas mismas razones las causantes del despoblamiento futuro. Y sobre todo, que ya basta de bonitas palabras en puertas de elecciones para después no hacer nada, o lo que es peor, de hacer exactamente lo contrario de lo que se dice que se quiere hacer.

martes, 13 de enero de 2015

LAICISMO VERSUS FANATISMO



El pasado lunes doce, tuve la oportunidad de asistir a la primera de las conferencias de la V Semana Laicista que se celebra esta semana en el Ateneo de Albacete, impartida por Matilde Fernandez, actualmente Vicepresidenta de ACNUR en España. Poca asistencia para aprender sobre algo que afecta a todos. Ideas para  reflexionar en un tiempo en el que la intolerancia religiosa ha teñido de sangre las calles de París.

Contenidos concretos: feminismo, libre pensamiento, igualdad, masonería. Análisis general del papel desempeñado por el laicismo en la historia y que tiene hoy. Para la RAE "laicismo" es "Independencia del individuo o de la sociedad, y más particularmente del Estado, respecto de cualquier organización o confesión religiosa"; "laico" es "Independiente de cualquier organización o confesión religiosa. Estado laico".

La idea de laicismo como una corriente de pensamiento que busca que la sociedad se organice de forma aconfesional, o completamente ajena a las confesiones religiosas. Me gusta más esta definición, porque la independencia de los individuos me parece hoy cuestionable por la capacidad de influencia de los medios de comunicación.


Su importancia, garantizar los derechos de las personas en igualdad, para participar en la vida política y social. Sin creencias religiosas, la libertad adquiere su más amplia interpretación. Cada individuo debe ser libre de creer o no creer, aunque las legislaciones de estados como el nuestro, muestran un empeño gubernamental por el retorno al catolicismo. ¿Qué decir de los fanatismos religiosos?

Laicismo no es solo una oposición a cualquier tipo de intromisión religiosa en la política, sino fundamentalmente a la injerencia de las religiones en los modelos educativos, porque al existir, esa intromisión supondrá un mecanismo de retroalimentación de las confesiones religiosas. Educar en libertad es enseñar a la resolución de los problemas en cualquier materia. La ciencia solo progresa a base de evidencias y las confesiones religiosas no las dan, quizás por eso la ciencia suele ir vinculada al pensamiento  agnóstico.

Laicismo no es prohibir a la gente que sea católica, protestante, musulmana, hinduista, o lo que le dé la gana, sino una cuestión de que esas confesiones se ejerzan dentro de la libertad de los individuos sin la intervención ni el apoyo de las administraciones. Tampoco es una manera de anticlericalismo, ni una postura antirreligiosa.

Nuestra Constitución declara al estado español aconfesional, pero no laico. Y aunque la Carta Magna no toma partido, si lo hacen los poderes del Estado. El Estado ni es creyente ni ateo en sí mismo, y libertad religiosa y confesión religiosa son derechos de la persona. El Estado es neutral según el artículo. 16.3 de la Constitución, y lo que debe es garantizar a los individuos la libertad para que crean lo que quieran, porque la religión pertenece al ámbito de lo privado.

El problema existente es que gobierno y medios de comunicación influyen de manera descarada, obedeciendo al dictado de los gobernantes y las empresas propietarias de esos medios. En un país como el nuestro donde no existe la blasfemia como delito, sin embargo el artículo 525 del Código Penal hace referencia a aquellas manifestaciones que "hagan públicamente escarnio, de palabra o por escrito, de quienes no profesan religión o creencia alguna", y expresa que las ofensas públicas a "los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa" pueden incurrir en penas de multa de ocho a doce meses. ¿Dónde queda esa neutralidad constitucional?

Tenemos todo el camino por andar en esta materia en nuestro país. El cierre de la conferencia se hizo con esta frase de  la profesora Celia Amorós “Libertad para las personas, Igualdad para las sociedades, y Fraternidad para la humanidad”. Todo un pronunciamiento contra los fanatismos.


sábado, 10 de enero de 2015

ELECTORALISMO CON LOS DEPENDIENTES



El IMSERSO ha hecho públicas sus estadísticas, actualizadas a 30 de noviembre de 2014. En ellas se concreta que en España son 167.869 las personas dependientes que se encuentran en lista de espera,  y que la cuarta parte de las que han causado baja en el Sistema de Dependencia, lo han hecho sin llegar a percibir ninguna prestación a las que tenían derecho tras ser evaluada su situación, y que por primera vez, de un año a otro, hay trece mil personas menos incluidas pese al envejecimiento de la población. Con esos datos oficiales, solo se puede concluir que a nivel estatal, este sistema no funciona.

El Sistema Nacional de Atención a la Dependencia (SAAD) que iba a ser el cuarto pilar del estado del bienestar, nació tarde y sin recursos. Se hizo tarde porque debió plantearse a la llegada socialista al gobierno, en lugar de hacerlo a mediados de la segunda legislatura, que imposibilitó su consolidación. Y sobre todo no se garantizó la financiación que le hubiera hecho resistente a los recortes. No vale la excusa de falta de recursos, sino de voluntad política, porque para otros asuntos si se dispuso de ellos.

Los recortes del PP llegaron a sanidad, educación y pensiones, pero estos tres pilares resistieron, podían recortarlos pero era inimaginable eliminarlos. Pero sobre el SAAD el ministerio de Ana Mato decidió de un plumazo que no se podía financiar, y que se debía seguir atendiendo desde la caridad y los apoyos familiares.

Como en otras materias, el laboratorio de experimentación elegido para aplicar recortes fue Castilla La Mancha. Pese a ser la que más recortes ha realizado en esta materia, el gobierno regional se obstina en afirmar que ha reducido a la mitad el listado de quienes esperan recibir una prestación en el último semestre de 2014, y que esta es la región en la que más profesionalizado está el sistema de dependencia. Esta información, choca frontalmente con lo que se manifiesta por los colectivos de afectados.

La llamada Ley de Garantías de los Derechos de las Personas con Discapacidad de Castilla La Mancha, reguladora de esta materia, pese a que fue aprobada por unanimidad en las Cortes de Castilla-La Mancha, en su aplicación ha recibido críticas de los sindicatos y diferentes colectivos como el de los trabajadores sociales. Es un lavado de cara del papel desempeñado en esta materia por el gobierno regional para a las elecciones.

La Plataforma en Defensa de la Ley de Dependencia regional, que agrupa a más de cuatro mil familias, afirma que en la región, más de diez mil beneficiarios han dejado de serlo; que ya no perciben ninguna prestación de las que antes percibían más de dos mil ochocientas personas; o que casi ocho mil dependientes tienen el derecho reconocido, pero siguen sin recibir ninguna prestación.

Las cifras hablan por sí solas. Desde que Cospedal llegó al gobierno, han fallecido cuatro mil personas que teniendo el derecho reconocido no han llegado a recibir ninguna prestación; han aumentado las valoraciones que resuelven indicando que carecen de derecho a prestación, siendo más personas sin derecho, que a las que se les reconoce, como si se solicitará por gusto; hay casi seis mil personas que eran grandes dependientes en la primera valoración y que han dejado de serlo en las revisiones. Este último hecho, realmente casi milagroso, se ha dado con relativa frecuencia en muchos pueblos de nuestra provincia.

Pero la situación más grave que tenemos hoy en Albacete y en Castilla la Mancha, es el problema de los grandes dependientes, que tenían una prestación económica y eran generalmente atendidos por sus familiares, y a los que ahora se les ha retirado esa prestación dineraria. La solución que se les ofrece desde la Junta, es sustituir la prestación que recibían por una o varias horas de ayuda a domicilio a través de servicios municipales, que la provincia de Albacete presta el Consorcio de Servicios Sociales de la Diputación.

Pero esta solución es cuestionable, puesto que algunos Ayuntamientos no pueden atender esa demanda de horas al carecer de auxiliares de Ayuda a Domicilio suficientes para atender la demanda. De no encontrar solución a esto, la respuesta, como en otras materias, será recurrir a empresas privadas para prestarles el servicio.

Es cierto que se han reducido las listas de espera, como afirma el gobierno regional, pero simplemente por el fallecimiento de muchos dependientes de edad elevada o enfermedades terminales, y nunca por una buena gestión del sistema por su parte. La proximidad electoral permite toda clase de lecturas a los datos, pero las necesidades de los dependientes son necesidades de personas, y no números sujetos a interpretación.


viernes, 9 de enero de 2015

EL SIGNIFICADO DE QUE MONAGO SE VAYA DE ROSITAS



La noticia de que la Fiscalía del Supremo archiva la querella por los viajes de Monago, supone un acto de fomento de la corrupción en toda regla, porque aquí queda demostrado que el mal uso de lo público puede quedar impune. En cualquier país de la Europa a la que pertenecemos, este señor llevaría semanas dimitido simplemente por razones de higiene democrática, sin necesidad de intervención del poder judicial.

Con el archivo de la querella, él se va (por ahora) de rositas de un asunto turbio. Por parte de la justicia se nos está afirmando que los senadores no tienen por qué rendir cuentas de sus gastos, que se pueden pagar sus viajes privados con nuestro dinero dando igual si van a ver a su amante o a dar un mitin de su partido (que no del Senado de España). Según la Fiscalía esto podrá ser legal, pero éticamente es impresentable, y una afrenta a los ciudadanos que soportamos los recortes en los derechos por parte precisamente de esos senadores. Es sencillamente un fallo vergonzoso.

Dejando al protagonista Monago a un lado,  e intentando mirar el cesto en lugar de la manzana podrida, el fallo de la fiscalía lo que está cuestionando es el papel que hasta ahora han desempeñado los partidos en nuestro sistema político, y especialmente el de los dos que han ejercido responsabilidades de gobierno. Por acción o por omisión, el fallo viene a demostrar la connivencia de los partidos para que no exista una total transparencia de los gastos de sus señorías (viajes, ayuda de vivienda en Madrid, etc.).

Algunos verán una decisión partidista porque al Fiscal del Estado le nombra el Gobierno. Pero quien pierde es la justicia por estas actuaciones, por si no ha sido suficiente desgaste para el ministerio fiscal el  actuar como defensor con la Infanta, ahora también lo hace cuando se trata de asuntos que afectan al PP. Nadie creerá en la independencia de la fiscalía, y resulta Imposible creer que el PP pueda actuar contra la corrupción. Lo peor de todo es que la factura de esta actuación, se la pasaran los ciudadanos al poder judicial, y con él a todo el sistema político.

Ahora viene la reforma de reglamentos, y aunque llegan tarde, mejor tarde que nunca. Deben regular los viajes de todos los diputados y senadores, pero desde luego no pueden hacerlo a medias como han hecho PP y PSOE, aunque el segundo se comprometa a ampliar la información que le afecta periódicamente. O lo hacen de verdad, o hacen imposible creer que tienen intención de cambiar. Así los ciudadanos seguiremos pensando que la justicia sirve solo a la clase política, y que usa dos varas de medir. Es un insulto.

Si la justicia está politizada, no es que los políticos sean inocentes, es que no quieren que exista separación de poderes. Es otra manera (una más sutil), de poner el ventilador y, sin quererlo, de llenar las urnas de votos a PODEMOS. En época electoral, no vale con pedir perdón con la técnica de Aguirre.

Volviendo a Monago, sin redundar en lo consabido de que una cosa es la responsabilidad penal y otra la política, hay que formularle le la pregunta del millón (nunca mejor dicho) ¿para cuándo deja lo de devolver el dinero?


miércoles, 7 de enero de 2015

A propósito de lo ocurrido hoy en París, NO A LA INTOLERANCIA

Me siento consternado por lo que todo apunta a que se trata de un ataque de odio por parte de unos fanáticos religiosos. Quiero ser prudente, porque aún es pronto para afirmar que es así, y no quisiera emitir juicios de valor de forma gratuita. Si está confirmado que hay una masacre, pero no aventuremos teorías hasta que se conozcan todos los detalles.
Es el momento de la prudencia porque habrá quienes aprovechen este hecho para manifestar su odio al diferente, y para descomponer, aún más, el sistema de sociedad hipócrita en el que vivimos. Todos somos las víctimas de esa gentuza disfrazada de defensores a ultranza de las religiones, cuando en realidad solo son grupos de poder. Es un acto de puro fascismo, que dará alas al fascismo europeo. La religión es solo una excusa para la barbarie, y la forma más antigua usada por el hombre para medrar por el poder.
Ya nos tocó en Madrid y en Londres, y ahora le ha tocado a Francia, el país de la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad. Hoy estos tres derechos han sido pisoteados. Algo se debe estar haciendo mal en ese país, donde muchos jóvenes de los barrios de las afueras de las grandes ciudades, acaban siendo carne de cañón, de los extremismos, de la delincuencia y del fanatismo. El fanatismo solo se puede nutrir de la ignorancia, el odio, y la miseria social.
Si se confirma la vinculación del islamismo con el atentado, será paradójicamente la extrema derecha francesa, esa que siempre apoyó al extremismo islámico fuera de territorio francés, la que electoralmente será más favorecida por lo ocurrido hoy. Por el contrario, a quien más daño le hará será a la gran mayoría musulmana respetuosa. Seguro que escucharemos que aprovecharan la sangre para exigir recortes a las libertades de las personas por su condición o raza.
Para poner a cada cual en su lugar, sería positivo que la comunidad musulmana que reside en toda Europa se manifestara de manera contundente contra estos asesinatos. Cuanto antes mejor, para callar esas bocas interesadas.
Parece claro que se trata de un atentado contra la prensa. La libertad de prensa y de expresión en el mundo, empiezan a costar un alto precio, pero siguen siendo fundamentales en nuestras sociedades democráticas. Esa libertad la mutilan quienes fomentan el racismo, la xenofobia y la falta de respeto a opiniones diferentes, porque con ello justifican la intolerancia y el fundamentalismo.
Nunca existen motivos para matar, ni políticos, ni religiosos. Si independientemente de creencias, entre todos no somos capaces de cambiar nuestras formas de relación en el viejo continente, se acabó la Europa donde se pueda libremente criticar todo lo que no nos guste. La idea es simple: NO A LA INTOLERANCIA.

martes, 6 de enero de 2015

OPTIMISMO INDECENTE



Desde ahora y hasta las Elecciones Municipales, y con mayor intensidad hasta  las Generales, leeremos, escucharemos y veremos los auténticos milagros y prodigios de quienes nos gobiernan. Luego, si consiguen garantizarse otros cuatro años de poltrona, ya investidos del respaldo popular, sacaran del bolsillo nuevas reformas estructurales, imprescindibles para sostener nuestra economía, que para entonces ya podrá volver a calificarse de precaria para que puedan ejercer de salvadores de la patria. Hasta ese momento todo serán buenas noticias para los sufridos españoles.

Un avance de este nuevo “España va bien” ha sido el optimismo gubernamental ante las cifras finales del desempleo en 2014. Es de bien nacidos felicitarse por la caída del paro en 253.600 personas durante el pasado año (un descenso del 5,39% desde 1999), y también por el incremento del número de cotizantes a la Seguridad Social. Pero no lo es engañarnos con que esos datos significan que ha llegado la recuperación mediante un desenfrenado optimismo del gobierno. No lo son para un país, donde sí revisamos lo que los trabajadores  hemos perdido desde el inicio de la crisis hasta hoy, un gobierno decente en lugar de mostrarse optimista debería llorar de pena.

El optimismo actual solo lo muestran en el Gobierno y sus alrededores, porque la gran mayoría de los españoles no sentimos optimismo. Ver que continuamos con el mismo modelo productivo que teníamos antes de empezar la crisis, y que nuestra deuda pública no ha parado de crecer desde entonces, no es para serlo. Las cifras de desempleo, pueden ser motivo de esperanza, pero no de optimismo, salvo que se oculte su talón de Aquiles, que son la temporalidad y la baja calidad del empleo creado.

Hemos creado empleo, pero el generado es precario, y de los 16,7 millones de contratos firmados el pasado año, solo 1,3 fueron contratos indefinidos. Acabamos 2014 con un total de 4,44 millones de parados, de los que algo más de dos millones podemos considerarlos como consecuencia de la crisis. Un gobierno responsable, debería dar su previsión de si es posible recolocarlos y decirnos como piensa hacerlo. Este ya lanza campanas al vuelo, como si el problema estuviese en vías de solución, sabiendo que no.

Otro análisis que no soportan estas cifras es hacerlo mirando al futuro del país. Tenemos casi 400.000 jóvenes en paro, pese a que casi medio millón que se han marchado y otros muchos han dejado de buscar empleo por desanimo Su situación es muy grave puesto que los empleos a los que pueden acceder son temporales, justificado esto por la falta de practica y experiencia que les exigen las empresas, y de las que forzosamente carecen. Su esperanza de alcanzar un día las cotizaciones suficientes para acceder a una pensión, cada mes que pasa se tornan más remotas.

Y que decir si vemos estas cifras en base a la calidad del empleo generado. Es cierto que en 2014 se han firmado 1,3 millones de contratos indefinidos, pero solo dos tercios de esos, lo son a tiempo completo. Además, los que se han firmado fueron en sectores vinculados en gran medida al turismo, como son comercio y hostelería, donde todos sabemos que el empleo es obligatoriamente inestable y donde los salarios son bastante precarios, como denuncian los sindicatos. ¿Es ese el nuevo modelo productivo que quieren implantar? ¿Piensa el gobierno que siempre viviremos de servir a los turistas?

El otro motivo de optimismo gubernamental son las cifras de afiliación a la Seguridad Social. Si las analizamos veremos que se ha registrado un crecimiento este año, y todo incremento en la afiliación es en si mismo positivo. Es cierto que los 16,77 millones de afiliados que tiene hoy la Seguridad Social superan en cuatrocientos mil a los que había hace un año, pero siguen muy lejos de los 17,2 millones que había afiliados en diciembre de 2011 cuando el PP llegó al gobierno. Pero no se nos dice que es lo negativo que debe estar ocurriendo en la Seguridad Social, para que un mes sí y otro también, el Gobierno recurra al Fondo de Reserva de la Seguridad Social para pagar las pensiones. ¿Y si fuera parte de una estrategia política?

Resumiendo este análisis, se puede afirmar que estas cifras muestran que hay más paro que con el anterior gobierno, que el empleo creado es mucho más precario porque hemos pasado de empleo de salario medio a nuevos contratos con salario miserable, que aun creciendo en número el pasado año es menor la cotización global a la Seguridad Social, y que al ser menores los salarios es menor el importe del IRPF. Si sumamos todos estos aspectos, las cuentas no salen ni pueden salir, y la solución que han encontrado para mantener el modelo es tirar del Fondo de Reserva de la Seguridad Social.

Unos y otros, son datos evidentes, pero parece que el gobierno no quiere admitir que la gran mayoría del empleo creado es precario, temporal y parcial, y así socialmente no vamos a mejor sino todo lo contrario. Y cuando se intentan acomodar todas las piezas del puzle en el que se ha convertido nuestro modelo económico, nos desconcierta ver, como pese al mal pronóstico que reflejan estas cifras, el gobierno le dice a Europa que subiremos el IVA ecológico este año y los dos próximos, que recortaremos en las pensiones y en las prestaciones del desempleo, y que a pesar de esto, aumentara el consumo interno (deben pensar que tiraremos de tarjeta de crédito).

Son ya tres años de programa incumplido y falsedades continuadas, y solo los fieles seguidores del partido del gobierno pueden creer que hemos entrado en tiempo de bonanza económica. Los demás debemos prepararnos para el triunfalismo propio de un año electoral, porque ya, la única preocupación del gobierno son los resultados electorales. Seguirán incansables en su objetivo de engañarnos continuamente y en considerarnos imbéciles que se tragan carros y carretas, salvo que se les demuestre que hoy somos mucho menos tontos de lo que piensan.

Como nada es casual en política, detrás de esta cortina de humo del empleo, me temo que la lógica nos dice, que si a la hucha de las pensiones le quedan cuatro días, pretenden hacernos ver que el actual sistema de pensiones es insostenible. El siguiente paso será convencernos de que la única salida de que alguien tenga en el futuro una pensión, sea trabajador o no, pasa por acogerse a las ofertas de las compañías de seguros y de la banca, y que esa será la única manera de garantizarnos que de mayores habrá un plato en nuestra mesa.

Podemos luchar contra este modelo que tratan de imponernos, aunque puede que por mucho empeñó que pongamos, esta economía globalizada en la que nos movemos, nos acabará enterrando. Rajoy tiene razón en que saldremos de la crisis, pero en las muy precarias condiciones que él está contribuyendo a que desde fuera se nos impongan.


EL GOBIERNO Y LA HEPATITIS C



El asunto más sangrante de este inicio de año 2015 es sin duda la situación que viven los españoles enfermos de hepatitis C. Se estima que en España hay más de setecientas mil personas infectadas de hepatitis C, una enfermedad vírica que se transmite por la sangre y que es la primera causa para precisar de un trasplante hepático. En la provincia de Albacete se declaran entre cinco y diez casos anuales, aunque la cifra de infectados se reconoce que es superior, y en Castilla La Mancha precisan de tratamiento más de dos mil pacientes.

Los últimos meses esta enfermedad ocupa la primera plana de los medios de comunicación, al no poder disponer los pacientes de un nuevo tratamiento que ha conseguido resultados muy positivos en los ensayos realizados antes de su comercialización. Es un asunto que debería llevar meses resuelto si el gobierno hubiese actuado pensando en los ciudadanos, pero parece que debe calificarlo como un asunto menor frente a otros, por no tener una respuesta rápida del ejecutivo. Resuelto, porque no hay ninguna justificación económica para la perdida de una vida, y menos en un país con recursos económicos para afrontar este problema, y por un gobierno que se jacta de ser un defensor de la vida.

Se debe garantizar el acceso de los, según las sociedades médicas, treinta mil pacientes graves que hay en nuestro país, a que dispongan de este último tratamiento y evitar así la desigualdad existente entre pacientes dependiendo de que vivan en una u otra Comunidad Autónoma. No parece de recibo que hablemos de un medicamento que está disponible dentro de los que se financian por el Sistema Nacional de Salud, y a la vez, ver como ese sistema no es capaz de garantizar que los enfermos pueden acceder al mismo cuando lo necesitan y está prescrito por su facultativo.

Desde el punto de vista clínico, debe valorarse que pacientes requieren con urgencia el tratamiento y cuales serían susceptibles de poder esperar, si es que no se dispone de medicación para todos. Lo no justificable es que no se administre el medicamento por estar a la espera de que se cierre la negociación entre Ministerio e industria farmacéutica, mientras los pacientes lo precisan.

En conciencia, debe primar la salud frente a la posibilidad de conseguir ya un abaratamiento del producto, sobre todo si se sabe que en España por no disponer del mismo fallecen diez enfermos diarios. Tampoco es una excusa válida para no facilitar la medicación, que en países como Egipto o India su precio no alcanza los mil euros y aquí alcanza los cincuenta mil, porque al existir allí millones de pacientes, la negociación que pueden plantear esos países no es comparable a la nuestra. Parece lo adecuado que primero curemos a los pacientes y luego discutamos todo lo que sea preciso.

Calificar de caro, no puede basarse solo en el coste total de los treinta mil tratamientos, sin poner en el otro lado de la balanza lo que ya nos suponen económicamente esas  30.000 personas enfermas, que no pueden trabajar, que estarán en situación de baja laboral, cobrando algún tipo de prestación, que requerirán cuidados médicos, etc. Si la cifra global asciende a 750 millones de euros, no se debe pensar que estemos hablando de una cifra disparatada para una sola enfermedad, sino de lo que supone poder tratar a las treinta mil personas que la padecen. Si calculamos que todos los pacientes demandaran al Estado por incumplir su obligación constitucional de garantizar el derecho a la salud, esa cifra puede resultar irrisoria.

Pero más vergonzoso resulta que el gobierno trate de tapar su falta de diligencia, culpando a las CCAA de ser las responsables de no facilitar el medicamento a los pacientes, porque es el Ministerio quien fija la cartera de medicamentos disponibles, y es el Gobierno quien debe garantizar la financiación autonómica para con ello permitir la equidad en el derecho de acceso a los servicios y tratamientos de salud de los pacientes, con independencia de la región de residencia.

Y no es una preocupación solo entre los pacientes, sino también entre la comunidad científica encargada del tratamiento de estos. Además vuelve a ponerse sobre la mesa otro asunto: el de los medicamentos que no está permitido prescribir en Atención Primaria, cuando científicamente podrían ser prescritos en ese nivel asistencial. Detrás, la mayoría de ocasiones solo hay un motivo económico, sin valorar que se gastan recursos en cosas menos necesarias que la atención sanitaria. En cualquier caso, lo que está pasando es éticamente un disparate bochornoso, porque parece que la vida carece de valor, y lleva a afirmar que el bienestar de los ciudadanos cada vez importa menos a nuestros gobernantes. Mejor dicho, la sensación es que solo importa que cuadren los balances a fin de año.

Necesariamente esta polémica debe hacernos reflexionar sobre cómo se gestiona el dinero de nuestros impuestos. Si es posible rescatar bancos o autopistas, debería poderse rescatar a ciudadanos abocados a una muerte segura si no se les trata. Se necesita acometer una actuación a nivel nacional para dar respuesta a este problema, como le ha propuesto la oposición al gobierno, disponiendo de los recursos para ello. Y como en este tema el gobierno carece de argumentos socio sanitarios y tampoco pueden ser solo los económicos, deberían recordar que estar en política exige valentía y eso se demuestra sabiendo rectificar a tiempo.


Mientras lo hacen o no, está claro que ningún enfermo, ni tampoco los enfermos de Hepatitis C, se merece vivir el calvario que hoy sufren, consecuencia de una gestión de la sanidad similar a la de un negocio, en lugar de la de un derecho constitucional

CAMBIO DE FASE

Se acabo la fase uno con Feijoo. Entramos en la siguiente fase, esperemos que, con Sánchez, porque el monarca es competente para darnos sorp...